A las 01:15 horas (madrugada) de este miércoles, Juan Sánchez Sánchez, de 36 años de edad, originario del estado de México, dedicado a la compra-venta de material reciclable, “chatarra”, con un mes de radicar en esta ciudad, se disponía bajar de su automóvil marca Dodge, tipo Stratus, color Gris, con placas MJZ-11-76 del Distrito Federal, lo conducía y viajaba solo, para entrar a su domicilio y negocio, ubicado en la calle 19 sur entre la avenida 110 y Arco Vial Poniente; en donde ya era esperado por un sicario, quien se acercó a la ventanilla y le disparó en cinco ocasiones con una pistola tipo escuadra, calibre 9 milímetros, abandonó el arma cerca de la escena del crimen, y por la hora en que ocurrieron los hechos el asesino se dio a la fuga sin contratiempo alguno, y no hubo testigos.
A la hora en mención, los operadores del número de emergencias 066 recibieron una llamada en la cual solicitaban auxilio de una ambulancia y de la Policía Municipal Preventiva (PMP), pues sujetos desconocidos habían detonado en varias ocasiones un arma de fuego, cuyos disparos hicieron blanco en la humanidad de una persona que se encontraba muy malherida en las puertas de su domicilio ubicado en la calle 19 sur con avenida 110 y Arco Vial de la colonia Ejidal, por lo cual de inmediato enviaron al grupo especial Fuerza de Reacción Inmediata (FRI) así como varias unidades del sector y una ambulancia de una clínica privada.
A su arribo, se percataron que en el interior de un auto marca Dodge, tipo Stratus, color gris y placas de circulación MJZ-11-76 del Distrito Federal, se encontraba tirado el cuerpo de una persona que vestía pantalón de mezclilla color azul, playera a rayas azules turquesa y rey así como tenis blancos, por lo que de inmediato se dieron a la tarea de acordonar el área para evitar que los curiosos alteraran la escena del crimen, sin embargo, en forma por demás extraña, un comandante con clave “Onix” prohibió a los paramédicos que revisaran al ahora occiso.
Poco tiempo después hicieron su arribo el agente del Ministerio Público del Fuero Común (MPFC), los elementos del grupo de homicidios de la Policía Judicial del Estado (PJE), acompañados de peritos del Servicio Médico Forense (Semefo), quienes luego de recabar las evidencias de la escena del crimen ordenaron el levantamiento del cadáver que presentaba un disparo en la mano izquierda, así como cuatro más en la espalda con salida en el pecho destrozándole el corazón, por lo que en total fueron cinco detonaciones que impactaron la humanidad del ahora occiso de quien se supo en vida respondía al nombre de Juan Sánchez Sánchez, de 36 años de edad, originario del estado de México.
Cabe hacer mención, que los paramédicos pudieron revisar al ahora occiso veinte minutos después de que arribaron al lugar de los hechos, sólo cuando los elementos de la PJE llegaron y preguntaron si se había realizado tal revisión, a lo que respondieron que no, por lo que de inmediato ordenaron realizar su trabajo para confirmar si había perdido la vida.
A simple vista se podía apreciar a un costado del automóvil, antes descrito, cinco cartuchos percutidos y uno útil calibre 9 milímetros, lo cual refuerza aún más la hipótesis de que fueron cinco los disparos que hicieron blanco en la humanidad del antes citado, uno de los cuales impactó en la mano izquierda y el resto en la espalda mismo que tuvieron orificio de salida hacia la zona pectoral, lo cual prácticamente le despedazó el corazón.
Durante las diligencias, arribaron al lugar de los hechos, el hijo del ahora occiso de nombre Jonathan Sánchez Martínez, así como sus hermanas y sobrinas que con llantos desgarradores exigían atendieran a su pariente, pues según ellos aún se encontraba con vida, sin embargo fueron ignorados y continuaron con su labor, toda vez que el sujeto ya había fallecido.
Los elementos de la PJE abordaron a un joven que señaló haber visto que un solitario sujeto se acercó y realizó varias detonaciones, sin especificar cuántos fueron en realidad y salió corriendo para abordar un auto que lo esperaba metros más adelante en una zona obscura, por lo cual lo abordaron a una unidad oficial y lo trasladaron hasta sus instalaciones donde sería sometido a un interrogatorio.
Cabe hacer mención, que durante las diligencias, entró una llamada al 066 en la cual reportaban que a la altura del centro nocturno Chillys Willi’s, se habían escuchado varias detonaciones por arma de fuego, por lo cual el FRI se dirigió al sitio, sin embargo, minutos más tarde se percataron que todo se trató de un distractor.
Como parte de las diligencias de rigor, el agente del ministerio público ordenó el levantamiento del cadáver para trasladarlo a sus instalaciones para realizarle la autopsia de ley y determinar bajo qué circunstancias falleció el sujeto que en vida respondía al nombre de Juan Sánchez Sánchez, aunque por la mañana regresaron los agentes de la PJE a revisar el área y entre los arbustos encontraron un arma de fuego calibre 9 milímetros, marca Pietro Beretta, con la cual al parecer consumaron la ejecución, sin embargo, habrá que esperar a que el departamento de balística concluya con los estudios periciales para determinar si fue el arma con la que ejecutaron al antes mencionado.
Alrededor de las 13:30 horas de este mismo miércoles, una de las hermanas del ejecutado de nombre Angela Sánchez Sánchez, de 34 años de edad, compareció ante el MPFC para reclamar del cadáver, y trasladarlo a su natal estado para darle cristiana sepultura.
Para esclarecer la cuarta ejecución de este 2013, por ajuste de cuentas, entre bandas rivales del crimen organizado, y tratar de dar con el o los responsables, el agente del MPFC abrió la averiguación previa marcada con el número 2705/2013 por el delito de homicidio en agravio de Juan Sánchez Sánchez, de 36 años de edad, originario del Estado de México. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
LO DEJARON MORIR: INTERVENCIÓN DE MANDO POLICIACO IMPIDE AYUDA DE PARAMEDICOS
PLAYA DEL CARMEN, MX.- Extraña actitud de un comandante de la Policía Municipal Preventiva (PMP) con clave “Onix” tras la ejecución de un sujeto la madrugada de este miércoles, toda vez que no permitió que los paramédicos prestaran auxilio al ahora occiso, a pesar del desgarrador llanto de uno de sus hijos que gritaba que su padre aún estaba con vida y agonizaba; testigos de la brutal ejecución señalaron que minutos antes de las detonaciones, vieron pasar una patrulla de la PMP y el primero en llegar fue el citado comandante.
En nota aparte, se da cuenta de la ejecución de un sujeto a quien ultimaron de cinco disparos con un arma de fuego calibre 9 milímetros, en la calle 17 Sur entre las avenidas 110 y Arco Vial de la colonia Forjadores, lo cual generó una impresionante movilización de los cuerpos de seguridad de los tres órdenes de gobierno.
Los primeros en llegar al lugar de los hechos fueron los elementos de la Policía Municipal Preventiva (PMP) al mando del comandante Guillermo Pérez Hernández con clave “Onix”, quien con la prepotencia que lo caracteriza ordenó que nadie se acercara a la unidad donde yacía el cuerpo del sujeto baleado y aunque escuchó que el hijo del lesionado gritaba que su padre aún estaba con vida, frenó la labor de los paramédicos que acudieron a atender al hasta ese momento lesionado, sin embargo se toparon con la prepotencia del comandante en mención.
Uno de los hijos del baleado llegó y abrió la portezuela del auto para abrazar a su padre y con gritos desgarradores que se podían escuchar varias cuadras a la redonda, decía que su padre aún estaba con vida. Sin embargo, esto no le importó al comandante en mención, quien como si tratara de que la ejecución se consumara, ordenó que nadie se acercara a la unidad, incluyendo a los paramédicos, quienes con la mirada estupefacta acataron la disposición.
Los paramédicos intentaron abrir la portezuela del copiloto, pues fue en ese asiento donde quedó la cabeza de quien en vida respondía al nombre de Juan Sánchez Sánchez. Sin embargo, el comandante antes descrito ordenó a sus elementos que nadie se acercara, perdiendo valiosos minutos que pudieron haberle salvado la vida al antes mencionado, pues el hijo gritaba que su padre aún estaba con vida.
Aun y cuando el ahora occiso se encontraba prácticamente agonizante, el comandante Guillermo Pérez Hernández con clave “Onix” no permitió que los paramédicos se acercaran a ayudar al lesionado, lo cual habla de una complicidad por omisión que debería de investigarse hasta las últimas consecuencias, pues de acuerdo con testigos entrevistados en el lugar de los hechos, una patrulla de la PMP pasó por el lugar y minutos después se escucharon varias detonaciones y de forma por demás extraña el primero en llegar fue el citado comandante. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)