El fuego fue provocado por una fuga de gas, debido a que la menor dejó abierta una hornilla de la estufa, cuando iba a preparar su desayuno y momentos después, encendió un cerrillo, lo que ocasionó un tremendo flamazo.
Los gritos de los menores alarmaron a un taxista, quien se convirtió en un héroe anónimo, cuando entró a la vivienda que estaba envuelta en llamas y sacó a los pequeños antes de que fueran alcanzados por el fuego.
Las primeras versiones señalaron que los niños viven en ese lugar únicamente con su madre, quien se dedica a recolectar chatarra y los dejó solos en la mañana, en busca del sustento para sus hijos.
La Secretaría de Seguridad Pública municipal informó que el incendio fue reportado a las 12:25 horas de hoy, en la Región 107, manzana 32, número 7-A, donde los dos hermanos fueron dejados solos por su madre, de quien no fue proporcionado el nombre.
La niña de 8 años de edad, dijo a los policías que iba a cocinar unos huevos para su desayuno y abrió una hornilla de la estufa para encender el fuego, pero en ese momento, descubrió que no tenía cerrillos.
De acuerdo con las primeras versiones, la menor envió a su hermano a una tienda cercana para que comprara los cerrillos, pero en ese lapso olvidó cerrar la hornilla de la estufa y estuvo escapándose el gas, el cual se acumuló en el interior del inmueble.
El infante de 7 años llevó los cerrillos a su vivienda, y momentos después su hermana encendió uno de estos, lo que generó un flamazo que incendió todas las pertenencias en el interior.
Elementos del Cuerpo de Bomberos acudieron al lugar y sofocaron las llamas, en medio de la alarma de los vecinos.
Los tragahumos reportaron que había mucho material flamable en el interior, por la chatarra que acumulaba la madre de los niños, asimismo, todo lo que había en el interior de la casa fue pérdida total.
Los menores resultaron ilesos afortunadamente y fueron trasladados al DIF municipal, por la situación de abandono en la que estaban. (Fuente: Diario de Quintana Roo)