Mediante un oficio, Guadalupe Álvarez Chulim, presidenta de esta agrupación, urgió de nueva cuenta a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a que envíe inspectores a constatar la devastación de la selva que está ocurriendo de manera cotidiana en este lugar, lo cual es una amenaza para decenas de especies que viven en la zona.
Como Citymar no ha obtenido respuesta a su denuncia, presentada mediante un oficio previo, la ecologista pidió a la Profepa que “si existe algún decreto por el que no puedan llevar a cabo la inspección correspondiente favor de hacerlo del conocimiento de esta asociación”.
El oficio de denuncia de Citymar está dirigido a Guillermo Haro Bélchez, procurador federal de Protección al Ambiente, pero con copia también para la delegada en Quintana Roo, Ludivina Menchaca para que “a la brevedad posible tome cartas en el asunto” porque “después de 4 meses ya no tiene caso su visita pues ya no habrá vegetación”.
Citymar denunció que aunque la sascabera fue explotada en el pasado, actualmente se encuentra en una zona donde la explotación minera o extracción de material petreo a cielo abierto está fuertemente regulada por el Programa de Ordenamiento Ecológico Local del Municipio de Cozumel, vigente desde el 2008, el cual establece una normatividad muy estricta para la conservación y rehabilitación de zonas impactadas y que, de acuerdo con la denuncia, en este predio no se cumplió porque nunca se instrumentó un programa de restauración del lugar. (Noticaribe)