CANCÚN, MX.- El secretario de Ecología y Medio Ambiente de Quintana Roo (SEMA), Rafael Muñoz Berzunza, aclaró que el proyecto de recuperación de playas presentado por el gobierno estatal a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), no corresponde a una obra nueva, sino que es continuación de lo autorizado al Fideicomiso de Restauración de Playas en Cancún, Playa del Carmen y Cozumel, el 19 de julio del 2009.
La semana pasada el gobierno del estado informó que el Ejecutivo estatal, Roberto Borge, se reunió con el titular de la Semarnat, Juan José Guerra Abud, para presentarle “los proyectos de la recuperación de playas de Cancún, Playa del Carmen, Cozumel y Holbox”.
“Ahí lo que se hizo fue una visita a la Semarnat, por parte del gobernador, para proponerle al secretario Guerra, reactivar el proceso de seguimiento al programa de restauración de playas en cuatro municipios. Es seguimiento”, dijo en breve entrevista.
Con excepción de Holbox –que carece de obras de rescate de playas aprobadas- el proyecto de Restauración Ambiental de Playas que autorizó la Semarnat el 19 de julio del 2009, de acuerdo con el resolutivo S.G.P.A./DGIRA/DG/3758/09, consistió en la extracción de 6.2 millones de metros cúbicos de arena, para depositarse en los otros tres destinos turísticos, en porciones diferentes.
El proyecto, autorizado al Fideicomiso de Restauración de Playas –encabezado entonces por la Secretaría de Turismo (Sectur), incluyó la colocación en Punta Cancún de una estructura de cierre, consistente en un brazo lineal conformado por bloques, para disminuir el golpe del oleaje y evitar la fuga de arena.
Las obras se condicionaron al monitoreo del proyecto durante 10 años, a la búsqueda y encuentro de al menos tres bancos marinos de arena, para extraer el material y detener el uso del Banco Norte, en Cozumel; también a la presentación de un programa de repoblamiento de caracol rosado. El financiamiento a través de un porcentaje de la recaudación por el uso, goce y aprovechamiento de la zona federal marítimo terrestre. (Fuente: El Periódico)