Parece que el coordinador de los diputados del PAN, Sergio Bolio, terminará coordinándose a sí mismo nomás.
Y es que la nueva Ley de Ordenamiento Cívico, que sustituye a la Ordenamiento Social, sería la puntilla en su “liderazgo” al frente de la bancada albiazul de la XIV Legislatura.
Con todo y el maquillaje, la nueva Ley de Ordenamiento Cívico sigue siendo impresentable y no sólo redunda en ordenamientos similares, sino que “rebuzna” en lo mismo, al suponer que las protestas son inaceptables en Quintana Roo.
Y Bolio terminó por formar parte de esta nueva iniciativa, la cual también signaron, la mayoría de los partidos, a excepción de Jorge Carlos Aguilar Osorio, del PRD y Hernán Villatoro, del PT.
Pero, la firma de Bolio, va sola, pues el resto de la fracción albiazul, las diputadas panistas, Trinidad García y Perla Tún, no se sumaron al aval de su coordinador de pretender regular la protesta social.
Lo cierto es que en el PAN hay una crisis de identidad, y la división entre las filas panistas se profundiza cada vez más.