Mario Balotelli apareció con un cabezazo e Italia sorteó el calor amazónico ganándole 2-1 a Inglaterra en el debut de ambos en la Copa Mundial.
Balotelli conectó de cabeza un centro desde la derecha de Antonio Candreva a los 50 minutos, con lo que encaminó a la selección azurra a su triunfo por el peleado Grupo D, que horas antes tuvo su apertura en Fortaleza, con la sorprendente victoria de Costa Rica sobre Uruguay 3-1.
Los italianos abrieron la lata a los 35 por intermedio de Claudio Maschisio, pero la celebración duró poco ya que Daniel Sturridge empató a los 37, en un partido que se disputó con temperaturas sobre los 32 grados centígrados y en una cancha cuyo césped no estaba en sus mejores condiciones.
Este clásico europeo fue electrizante de comienzo a fin, aunque en la primera mitad fue Italia la que llevó las manijas del encuentro e Inglaterra se mostró más incisiva. A los cinco minutos, los ingleses dieron el primer aviso serio con un remate de Jordan Henderson que quemó las manos de Salvatore Sirigu, quien salió bajo los tres palos debido a que el Gianluigi Buffon no pudo jugar por lesión.
Con el veterano Andrea Pirlo llevando los hilos e imponiendo carácter en el mediocampo, los italianos hilvanaron mejor sus llegadas, aunque en la primera media hora no generó peligro de verdad. Balotelli se hizo notar apenas a los 23 con un disparo alto, en tanto que Inglaterra fue punzante en su velocidad, con hombres como Sturridge, Henderson y Raheem Sterling como flechas.
Luego vino la picardía y genialidad de Pirlo que ayudó en el tanto de la apertura. Dejó pasar un pase desde la banda, engañando a varios defensores ingleses, y Marchisio tuvo todo el tiempo para acomodar la pelota y vencer a Joe Hart con un remate cruzado. Sturridge replicó casi de inmediato tras un buen centro de Wayne Rooney, quien en casi todo el partido sólo hizo un disparo con algo de riego para Italia al inicio del complemento.
Los dos tantos llegaron como un rayo, en momentos en que Inglaterra se asomaba con más peligro e Italia dominaba la posesión de la pelota.
El calor y la humedad amazónica parecieron pasa factura a ambos equipos que bajaron las revoluciones en los minutos que siguieron al gol de Balotelli, quien no terminó el partido al parecer por cansancio.
Sirigu hizo que no se echara de menos a Buffon y se convirtió en el segundo tiempo en figura, al despejar un venenoso remate de Leighton Baines sobre el final del partido. Pirlo también lo tuvo para el tercero, con un remate de tiro libre que escupió el travesaño. (Fuente: AP)
