Educar la mente de los Borgia – “La cúpula legionaria sabe que está sitiada” – Por Pablo Pérez Guajardo

El PAPA Francisco nombra al P. Gianfranco Ghirlanda (foto), S.J. asistente pontificio de la Legión de Cristo

El jueves 3 de julio de 2014, el Papa Francisco (jesuita) nombra al padre Gianfrando Ghirlanda (jesuita) Asistente Pontificio de la Congregación de los legionarios de Cristo. Es decir, el Papa pone a uno de sus hombres de confianza dentro de la cúpula para ver qué pasa en la Legión de Maciel. La mentalidad legionaria no asimila la situación y lo proyecta en el titular de su página oficial al indicar: “NOMBRAN al P. Gianfranco Ghirlanda…” en vez de aseverar “EL PAPA nombra”. No es un impersonal grupo de curiales mal intencionados los que NOMBRAN. Es el Papa quien toma la decisión.

Los datos permiten hilar algunas reflexiones para leer en profundidad el sentido o significado de este singular nombramiento.

1) En la primera etapa de la reforma legionaria, el padre Luis Garza Medina encabezó la oposición (elegante, terca y maquiavélica) a tener como jefe de la reforma al padre Ghirlanda con el que discrepó en la Pontificia Universidad Gregoriana por temas legionarios. Por fin quedó el arzobispo Velasio de Paolis, más tarde cardenal.

2) En la mitología legionaria, los jesuitas han sido la Bestia Apocalíptica. Los jesuitas han sido los pérfidos promotores de la teología de la liberación. El enemigo número uno del papado. Los corruptores del auténtico espíritu del Concilio Vaticano II. Maciel trabajó a la secretaria de gobernación de Mèxico dirigida por Luis Echeverría Álvarez señalando a los jesuitas como punta de lanza del movimiento estudiantil de 1968. De esa venta, consigue los permisos y medios para pasar la Universidad Anáhuac de la casona de calle Ahumada Villagrán (en Lomas Virreyes) a la ubicación actual en Lomas Anàhuac. Como también consiguió la información privilegida de que el nuevo presidente de México, Luis Echeverrìa Alvarez crearía el Acapulco del Caribe (Cancún). Gracias a eso consiguió que el Papa Pablo VI entregara a los legionarios de Cristo la incomunicada y miserable prelatura de Chetumal (1970) que pronto se conviritió en la orgullosa Prelatura legionaria de Cancún.

3) Con un Papa jesuita y un inspector jesuita, la cúpula legionaria sabe que está sitiada. Las usuales tácticas de corrupción y simonía no prosperarán con la facilidad tradicional. La cortesía y las buenas formas, la terquedad y el juego de asentir de inmediato a los cambios para dar largas a la realización, costará mucho. El reto principal que encuentran Francisco y Ghirlanda no es un cambio de estructuras, es un CAMBIO MENTAL. Los legionarios formados por Maciel viven la ley como el inglé: se escribe de una manera y se pronuncia de otra. O con estilo bìblico de Maciel: “está la Ley,,,, y los profetas”. El tiempo corre a favor de los legionarios que esperan tiempos mejores con un Papa no jesuita.

4) Casi se diría que se consintió la celebración del Capítulo General extraordinario (enero 2014) para hacer un medio tiempo y sacar de la jugada al cardenal Velasio de Paolis y posicionar la mano más firme de Ghirlanda. Claro está, con el riesgo de congelar la partida y quedar tablas. Prolongar el sitio para que se canse el inspector o Asesor Pontificio.

5) El si y no. El clarouscuro y las aguas tibias del Vaticano presentan a un inspector o “Asesor Pontificio” que no es parte del gobierno de la Legión, pero puede estar como “asesor” en las reuniones y actividades del consejo general. Se entiende que si hay algo que “no funciona”, el Asesor Pontificio lo refiere al Papa y el Pontífice o instruye al Asesor o se comunica con el Director General. Total, de que el Asesor Pontificio no quedará como un libro de consulta.

6) Las cosas parecen ir bien porque se anuncia que la redacción de las recicladas Constituciones sólo requieren detalles de cánones y citas que ayuden a la interpretación del texto. Ese poco es mucho. Refleja la preocupación medular: de nada sirve un cambio de estructuras si no hay un CAMBIO MENTAL.

7) Las cosas no parecen ir bien porque los “consagrados”, “consagradas” y laicos semi-consagrados y laicos no consgrados, nadie sabe que relación tienen con la Legión de Maciel. El padre Ghirlanda tendrá que seguir lidiando con la terquedad de la tesis doctoral de derecho del padre Luis Garza Medina y la gente que piensa como Luis Garza Medina.

8) Para los legionarios que con el Capítulo General extraordinario (enero 20014) cantaban victoria y el regreso a la normalidad: “por fin nos dejarán trabajar”, el “Asesor” cae sobre ellos como agua fría en crudo invierno. Con este simple nombramiento queda en claro que persiste la crisis institucional con lo que implica tal situación.