CANCÚN, MX.- Agentes de la Policía Judicial del Estado (PJE) lograron rescatar a una modesta empleada que fue víctima de una llamada de extorsión en la que los criminales le exigieron el pago de 100 mil pesos para no “rafaguear” el negocio de quesadillas en el que labora. Datos recabados por la reportera confirmaron que tras un intenso operativo de búsqueda por hoteles y hospitales del Centro de Cancún, se logró la ubicación de la agraviada.
En este sentido, según se pudo averiguar, la PJE recibió el reporte de un secuestro virtual en un establecimiento comercial denominado “Las Kekas”, ubicado en la avenida Palenque con Chichén Itzá, siendo que al arribar al lugar se entrevistaron con el encargado L.A.A.M., quien afirmó que a eso de las 13:50 horas, sonó el teléfono del establecimiento contestando la cajera de iniciales G.G.C.M, y al terminar la llamada, ella se retiró del local, mientras que otro empleado le preguntó a dónde iba, respondiendo visiblemente nerviosa que a ponerle una recarga a su celular, llevándose de la caja la cantidad de 600 pesos.
Al respecto, el entrevistado sostuvo que al paso de una hora, los empleados del lugar comenzaron a recibir llamadas de los números 7711317578 y 8311143646, en las que una sujeto de acento norteño, les aseguró que tenían secuestrada a la joven y exigían la cantidad de 100 mil pesos como “rescate”.
Fue en ese momento cuando inició la búsqueda de la empleada, quien fue localizada cuando caminaba en la avenida Uxmal con dirección a la Tulum, a la altura de la terminal de autobuses.
Al ser abordada por los agentes de la PJE la agraviada manifestó que se encontraba en su centro de trabajo cuando recibió la llamada en la que la amenazaban y le pedían que proporcionara su número telefónico para recibir instrucciones o si no iban a “rafaguear” el local, por lo que salió del comercio para hacer una recarga telefónica, siendo que los criminales le indicaron que las nuevas instrucciones eran que se dirigiera a un negocio de Internet y que viera una película para hacer tiempo. (Fuente: Diario de Quintana Roo)