CANCÚN, MX.- La delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Ludivina Menchaca Castellanos, no ve los años ambientales que cometen los grandes capitalistas, sino solamente a los ejidatarios, campesinos y pequeños propietarios.

Graciela Saldaña Fraire, diputada federal por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y la senadora por el mismo partido, Luz María Beristáin Navarrete, afirmaron que Ludivina Menchaca Castellanos “sólo ha servido como un pago de facturas políticas al Partido Verde Ecologista de México y poco ha servido para defender el entorno ambiental del estado”.

Recordaron que desde que ocupó el cargo su actuación ha demostrado “sólo aplica de manera parcial la Ley para favorecer a los grandes intereses de particulares y no para proteger las áreas naturales o la devastación de manglar y el ecosistema”.

Inclusive Luz María Beristán Navarrete exigió la renuncia de la actual delegada de la Profepa en Quintana Roo, Ludivina Menchaca Castellanos, “por proceder en contra de los habitantes”.
En caso específico de la detención de los 16 ejidatarios de la isla de Holbox, la senadora reprobó el excesivo uso de las fuerzas armadas y aseguró que es una mentira que estén devastando mangle.

Sostuvo que a lo largo de años y ahora con Ludivina Menchaca Castellanos al frente de la delegación, sólo ha defendido a los grandes hoteleros y consorcios, mientras que la protección al medio ambiente lo deja a un lado.

Con respecto al caso de los holboxeños detenidos, indicó que “detrás del operativo hay ganas de fastidiar a alguien o de mandar un mensaje a la comunidad que se opuso a un gran proyecto como La Ensenada”.

La diputada federa Graciela Saldaña Fraire expresó que es totalmente inoperante la dependencia que maneja Menchaca Castellanos en Quintana Roo, porque no ha resuelto las denuncias que se han interpuesto cuando se trata de proteger a los grandes capitalistas.

Citó como ejemplo que en el predio de El Tucán, del proyecto Dragon Mart, Ludivina Menchaca permitió la tala ilegal y no intervenido para detener la afectación al medio ambiente.

Afirmó que ella y numerosos organismos sociales, en su momento, ingresaron denuncias, demandas y recursos de impugnación en contra de los trabajos que realizaba el Dragon Mart, sin embargo, solamente respondió “vamos a ver”, y en ningún momento procedió a clausurar la obra ni acordonar el área. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

Comentarios en Facebook