El terrorismo fiscal de la administración municipal de Benito Juárez no da tregua a los ciudadanos cancunenses.
Los presidentes municipales de Benito Juárez, Mauricio Rodríguez, José de la Peña y Paul Carrillo, buscan recaudar hasta bajo las piedras.
Luego de irse contra los letreros en fachadas de los negocios, ahora los fiscales de la Comuna, están como sabuesos buscando a pequeños comercios que están dentro de las casas habitación.
Uno de los casos más dramáticos, fue la inspección contra una persona de la tercera edad, a la que le descubrieron que en la sala de su casa vendía frutas y verduras.
Y sin piedad, esta persona fue enviada al Palacio Municipal a contribuir con “los resultados que transforman”.
Pero, lo rarito es que por más que los alcaldes De la Peña, Rodríguez y Carrillo exprimen a los ciudadanos, la Comuna sigue sufriendo hasta para pagar las quincenas a los trabajadores municipales.