Que los dirigentes perredistas están al borde de un ataque de nervios.
Y es que en el “nuevo” y “refrescado” PRD de Quintana Roo nomás no encuentran candidatos a diputados federales.
Primero, quisieron hacerse los vivos, tratando de mandar a sus enemigos políticos dentro del mismo PRD.
Luego le pidieron “el favor” a sus priistas aliados dentro del PRD.
Después, llamaron a externos.
Ahora están buscando hasta por debajo de las piedras.
Y nada, y el plazo fatal se acerca.