Por Mauricio Conde Olivares
En Cancún, el PRI le dio su regalo anticipado de Navidad a los habitantes del Ayuntamiento de Benito Juárez y también a los turistas nacionales e internacionales que opten por visitar al más importante destino turístico de México y el Mar Caribe, pues aprobó junto con el Partido Verde el aumento de un peso al pasaje del transporte urbano, que quedó en 8 pesos para la ciudad y 10.50 pesos en la zona hotelera.
Nuevamente en sesión de Cabildo a puerta cerrada, como cuando aprobaron darle 39 años más de concesión del servicio de agua potable a la empresa Aguakán para consolidar un monopolio en la zona norte de Quintana Roo, ahora la “aplanadora” priista con su mayoría en el máximo órgano de gobierno municipal dijeron “sí” al incremento tarifario para beneficio de las cuatro empresas concesionarias del transporte urbano de pasajeros.
De esta forma, el transporte público de pasajeros en Cancún se colocó como uno de los más caros en todo el país, solo detrás de los 13 pesos que cobran los camiones urbanos en Tijuana donde recientemente les aumentaron dos pesos a la tarifa; de los 12 pesos que cuesta el transporte urbano en Monterrey, frente a los 7 pesos que se cobran en Guadalajara o los 5 pesos por los primeros 5 kilómetros en el Distrito Federal, que se transforman en 6 pesos cuando es mayor el kilometraje de traslado.
Todo ello porque el presidente municipal de Cancún, Paul Carrillo de Cáceres renunció junto con los regidores priistas a su derecho a votar “no” al referido incremento, al pretextar una resolución favorable a las concesionarias del transporte por parte del Tribunal de lo Contencioso Administrativo que ordenó la reposición del procedimiento que originalmente negó dicho aumento, porque los regidores sospechosamente en principio no fundamentaron su negativa.
En ninguna parte del resolutivo se ordenaba aumentar el pasaje urbano de pasajeros, pudo nuevamente la Comisión Mixta Tarifaria del ayuntamiento, que preside Paul Carrillo, ahora sí justificar su negativa al incremento porque a la fecha las concesionarias han incumplido los descuentos a estudiantes y a Adultos Mayores, y turnar al Cabildo incluso la revocación de la concesión sin caer en desacato alguno, puesto que la determinación a favor o en contra que dictaran los regidores sería materia de otro pleito distinto en tribunales, pero la autoridad municipal prefirió caer en la simulación y el engaño ante la opinión pública, es algo verdaderamente lamentable porque traicionaron a la población al no hacer valer las “condicionantes” para otorgar ese aumento que establece el propio reglamento.
La versión oficial del Ayuntamiento de Benito Juárez dictó lo siguiente: “De forma responsable y en apego a la institucionalidad que nos ha conducido desde un inicio a través de políticas públicas y sociales de gobierno, damos cumplimiento a la disposición emitida por la Sala Constitucional y Administrativa del Tribunal Superior de Justicia del Estado, con relación a la actualización de las tarifas para la prestación del servicio público urbano de pasajeros, teniendo como prioridad cuidar que dicha medida no impacte severamente el bolsillo de los ciudadanos, afirmó el presidente municipal Paul Carillo de Cáceres.
Prosigue la versión oficial que “Luego de haber rechazado el Ayuntamiento en cuatro veces anteriores (enero, julio, octubre y noviembre del año en curso), aplicar un incremento al pasaje por considerar que no se cumplen los requisitos para ello y porque las empresas concesionarias solicitaban 2.50 pesos más sobre el pago vigente en las rutas, el Cabildo de Benito Juárez aprobó por mayoría de votos la disposición de la Sala Constitucional y Administrativa del Tribunal Superior de Justicia del Estado que dictaminó anular la reciente negativa de la Comisión Mixta Tarifaria, y apegarse al artículo 118 Bis del Reglamento para la Prestación del Servicio Público de Transporte Urbano de Pasajeros en Autobuses en Ruta Establecida del Municipio de Benito Juárez, se establece el aumento de solamente 1 peso, quedando en 8.00 pesos para la zona urbana y 10.50 pesos en la zona hotelera de Cancún”.
Añade que “El referido artículo data del 5 de septiembre del 2013, cuando la administración perredista encabezada por el entonces presidente municipal Julián Ricalde Magaña, al celebrar la Cuadragésima Sesión Extraordinaria de Cabildo, indicó que la tarifa se actualizaría cuando el incremento porcentual acumulado del Índice Nacional de Precios al Consumidor exceda el 4 por ciento, sin que en ese entonces se considerara el impacto al gasto de los usuarios de autobús que representaría dicha modificación a la normativa municipal vigente”.
Ya con el niño ahogado, precisó el gobierno de Paul Carrillo que “Sobre lo anterior, el actual Cabildo municipal se comprometió a la brevedad a trabajar mediante una comisión especial que será conformada para revisar a fondo las modificaciones realizadas al Reglamento para la Prestación del Servicio Público de Transporte Urbano de Pasajeros en Autobuses en Ruta Establecida del Municipio de Benito Juárez, con el fin de establecer parámetros óptimos para la prestación del servicio tales como las condiciones de las unidades de traslado, tarifas y calidad en la atención, para que los usuarios sean los principales beneficiados”.
Como aprecia amable lector, por ningún lado aparece mención alguna al incumplimiento de descuentos en las tarifas a estudiantes y Adultos Mayores, circunstancia válida para revocar la concesión de inmediato.
Por eso, Abraham Solís de las asociación de estudiantes de la Universidad del Caribe; Jorge Martínez, de la Universidad La Salle-Cancún y Sonia Gordillo, de la Asociación de Padres, Madres y Tutores en Defensa de la Nación, y alumnos de la Universidad del Sur, en conferencia de prensa, retaron al presidente municipal Paul Carrillo de Cáceres a un debate público sobre la autorización de lo que calificaron un “injusto aumento al pasaje”, al tiempo que los estudiantes adelantaron movilizaciones de protesta a partir de la próxima semana.
Adicionalmente, los líderes estudiantiles cancunenses anunciaron que a través de los alumnos de las carreras de Administración e Ingeniería de varias universidades locales propondrán a Paul Carrillo un plan de reingeniería financiera para aplicar en el sistema de transporte urbano de pasajeros de la ciudad “para ahora sí hacerlo viable económicamente hablando, toda vez que las concesionarias y las autoridades incurren en fallas injustificadas como la inexistencia de paraderos para los autobuses, que generan mayor desgaste de las unidades y excesivo consumo de la gasolina, entre otros ejemplos”, pero esto será motivo de análisis en otra entrega en punto de la Hora [email protected]
