CANCÚN, MX.- Minutos de terror vivieron pasajeros de la empresa ADO que viajaban en un autobús de Puebla-Cancún, pues al pasar por Coatzacoalcos, Veracruz, fueron víctimas de dos sujetos armados con pistolas que los bajaron de la unidad y los despojaron de todas sus pertenencias.
Padres de familia, niños y mujeres embarazadas tuvieron que pasar por la terrible experiencia, mismos que además de ser ultrajados y asaltados, fueron testigos de cómo los delincuentes abusaron sexualmente de una joven de sólo 17 años de edad.
A pesar que los ciudadanos, la mayor parte de ellos turistas que intentaban llegar a este polo turístico para visitar a sus familiares, fueron despojados de todo su dinero y pertenencias por un error que posiblemente fue del conductor al desviarse de la ruta, la empresa intentó negarse a hacerse responsable por los daños ocasionados.
Fue alrededor de las dos de la tarde de este sábado cuando un grupo de aproximadamente 30 personas arribó a bordo del camión 8245, a la terminal de autobuses ADO, ubicada en la avenida Uxmal, cruce con Tulum, procedentes de la ciudad de Puebla, mismos que angustiados y desesperados pidieron hablar con el gerente de la empresa.
Ante el director jurídico y el abogado de la compañía, los pasajeros relataron que al llegar a la caseta de Coatzacoalcos, Veracruz, alrededor de las once de la noche de este viernes, el chofer del autobús que llevaba a 42 personas tomó una ruta alterna y bajó su velocidad de manera sospechosa, hasta llegar a una zona sin señal y en medio de la selva.
Relataron que después de al menos cinco minutos de estar sobre esa carretera, un vehículo tipo taxi le cerró el paso al camión y de ahí se bajaron dos sujetos jóvenes, mismos que portaban un arma de fuego, con la cual se subieron a la unidad para amenazarlos y obligarlos a bajar.
Con lágrimas, los afectados señalaron que después de tenerlos en la selva e incluso encañonarlos, los sujetos los despojaron de todas sus pertenencias, tales como celulares, joyas y dinero en efectivo, pero si alguno se negaba, los delincuentes les ponían la pistola en la cabeza y comenzaban a tocarlos por todo el cuerpo.
Manifestaron que aún ante niños y mujeres, los delincuentes se propasaron con todas las damas del camión tocándolas de forma lasciva, hasta que ambos decidieron ultrajar sexualmente a una joven de 17 años que viajaba sola.
Fue así como, después de 20 minutos de mantenerlos sobre la carretera y tras cometer los aberrantes actos, los ladrones decidieron dejar ir al camión, motivo por el cual se trasladaron hasta Coatzacoalcos para dejar a la joven agraviada en un hospital y continuar hacia su destino.
A pesar del terrible relato, los representantes de la empresa en un principio les afirmaron que no podían hacer nada, a pesar que el chofer del camión cambió su ruta sin autorización, motivo por el cual muchos de los pasajeros simplemente se retiraron para olvidar la experiencia, mientras que otros permanecieron luchando en la zona para exigir que se les reembolsara el dinero de los pasajes.
Fue hasta alrededor de las 06:30 de la tarde cuando la empresa decidió obsequiar a los agraviados una torta y un refresco, pues hasta esa hora entendieron que los pasajeros no habían comido por más de 12 horas al quedarse sin dinero y pertenencias.
De forma arbitraria, los abogados de la empresa hicieron firmar a los agraviados diversos papeles en los que deslindaban a ADO por los hechos ocurridos, esto, a cambio de un boleto de regreso a su ciudad de origen, a pesar de que los afectados perdieron hasta 20 mil pesos en objetos de valor, lavándose por completo las manos de los peligrosos hechos.
Muchos de los agraviados aceptaron y se retiraron, afirmando que en México ya no se puede vivir tranquilo. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)