PLAYA DEL CARMEN, MX.- Taxistas explotan contra la administración del fraccionamiento condómino-residencial y hotelero Playacar, reciben un trato inhumano, los obligan a realizar labores de tránsito y vialidad como si fueran reos, si algún trabajador del volante parado bajo los rayos del sol del medio día se baja de su vehículo y se para a la sombra de algún árbol es sancionado hasta por 15 días, sin poder entrar al lugar, además los hoteles les cobran derecho de piso y comisión por los servicios que agarren, ante toda la inconformidad bloquearon por breves instantes el acceso a Playacar y tomaron simbólicamente las instalaciones de las oficinas de la administración del fraccionamiento.
Alrededor de las 12:10 horas, un grupo de aproximadamente 40 taxistas bloquearon momentáneamente el acceso principal, sin embargo, un convoy de la Marina Armada de México pasó por el lugar indicándoles que no podían bloquear completamente el acceso, ante lo cual se replegaron a las instalaciones de las oficinas de la actual administración que desde hace dos meses está a cargo del polémico y exclusivo fraccionamiento.
Los ruleteros comentaron ante los medios de comunicación que reciben un trato indigno e inhumano desde hace muchos años, sin embargo, en los últimos meses con la nueva administración las cosas han empeorado, como si se tratara de una cacería de brujas.
“No tenemos un sitio digno de trabajo, no se puede uno parar un segundo, porque tienen cámaras y nos graban, luego nos dicen que estamos suspendidos hasta por 15 días sin poder entrar, nos dicen que no podemos bajar del taxi aunque haga mucho calor y estemos en el pleno sol, si nos bajamos igual nos castigan con 15 días, tenemos que estar con el motor encendido y gastando gasolina, queremos que nos traten dignamente, no les estamos pidiendo regalado, estamos trabajando dando un servicio necesario para los turistas”.
Ante las irregularidades y abusos de autoridad, principalmente por los elementos de seguridad privada, los ruleteros comenzaron a gritar voz en cuello, “que se vaya William, que lo corran, no lo queremos”.
Y es que Wiliam Almeida, jefe de seguridad del complejo, constantemente comete irregularidades y abusos contra los ruleteros, solapado por el nuevo administrador, a quien todos conocen simplemente como Oscar.
Estando reunidos los taxistas se apersonó Oscar, el administrador desde hace dos meses, con la intención de dialogar, sin embargo, se convirtió en monólogo argumentando que era un fraccionamiento privado; sin embargo, los taxistas continuaron con su movilización y ante la lluvia de quejas al administrador no le quedó de otra más que aceptar una reunión en las mismas instalaciones, con un grupo de cinco representantes; sin embargo, se negó a hablar con la prensa, incluso les negó el acceso a las negociaciones en las que aparentemente no llegaron a nada.
Los taxistas del sindicato Lázaro Cárdenas no son los únicos que han sido tratados indignamente por la administración del fraccionamiento, lo mismo ocurre con el Sindicato de Tricicleros, mismos a los que hasta el momento no se les permite la entrada, y amenazan también con realizar un bloqueo parcial del acceso principal del fraccionamiento. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)