Joseph Blatter fue reelecto este viernes como presidente de la FIFA, luego de que su adversario renunció a la candidatura luego de la primera ronda de votación en una elección que se da en medio del escándalo de corrupción en la organización.
Antes de la votación, Blatter dijo que toma la responsabilidad de la crisis actual, pero que la organización es demasiado grande para que él pueda supervisar a todos.
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“Estoy dispuesto a aceptar que el presidente de la FIFA sea el responsable de todo, pero me gustaría compartir esa responsabilidad con ustedes”, dijo. “No podemos supervisar a todo el mundo que está en el futbol”.
Hay 209 asociaciones miembro, y en total unos 1.6 millones de personas se ven afectados en todo el mundo, dijo.
“No podemos permitir que la reputación del futbol y de la FIFA sea arrastrada por el lodo, no podemos aceptar eso. Porque los que están detrás de esto, son quienes tienen realmente la culpa, sobre todo si son condenados. Son individuos, no toda la organización”.
Y en un último llamado a los votantes este viernes, Blatter dijo que quiere “reorganizar la FIFA junto con ustedes, y de inmediato”.
“No necesitamos una revolución (…) Pero todavía necesitamos, y siempre necesitamos, la evolución”, dijo, afirmando que “el fútbol necesita un líder fuerte, con experiencia”.
Por el contrario, en su presentación como candidato, Bin al Hussein dijo que él era la mejor persona para restaurar la confianza en el organismo.
“No voy a ocultar entre sus filas cuando las cosas están mal, y dar un paso adelante cuando las cosas están bien”, dijo el príncipe Ali. “Si ustedes me da el honor de su voto, voy a asumir la plena responsabilidad y rendir cuentas a todos ustedes y al mundo”.
Estados Unidos anunció la detención de siete de 14 altos miembros de la FIFA involucrados en presuntos actos de corrupción por 150 millones de dólares en los últimos 20 años.
Además, la justicia de Suiza realiza una investigación por separado sobre posibles actos de corrupción en la elección de los mundiales de Rusia 2018 y Qatar 2022.
En ambas acusaciones, tanto Blatter como la FIFA han dicho que están dispuestas a cooperar con las autoridades, aunque el propio presidente del organismo no está siendo acusado de ningún delito hasta ahora.
Cada asociación nacional de las 209 que integran la FIFA tenía un voto que fue depositado de forma secreta en una urna. Blatter necesitaba dos terceras partes de los votos emitidos para ganar la elección. (Fuente: CNN)