El candidato “ni-ni”, Antonio Cervera no deja de sorprender.
Y no es que ahora se haya “agarrado” con la dirigente panista Jéssica Chávez, pues ya hay antecedentes de que eso de la caballerosidad no va con el candidato del Movimiento Ciudadano, pues no hace mucho que perdió las formas también contra la regidora Latifa Muza.
Lo que sí sorprende es que quiere seguir jugando su papel de que no es político y que es un ciudadano 100 por ciento puro.
Jessica le retó a que transparente sus gastos de campaña, pues como diría aquel filósofo tabasqueño “quien pompo” espectaculares “quien pompó”.
Cervera ya no supo qué decir y se salió por la tangente con el alegato de que es candidato “externo” y por ello, no está obligado a dar esta información.
Pero resulta que Cervera formó (o forma) parte de la dirigencia colectiva del Movimiento Ciudadano en el estado e incrustó a un buen número de familiares en la dirigencia municipal de ese partido.
Y aunque lo niegue, el “ciudadano” Cervera es todo ya un político completo.