Que en las próximas horas, el ex alcalde de Cancún, Julián Ricalde Magaña, anunciará su renuncia al PRD.
Ricalde Magaña había luchado para evitar que el Gobierno del estado se apoderara del PRD.
Sin embargo, fueron más determinantes los cañonazos lanzados desde la Casa de Gobierno a líderes de corrientes y jefes de tribus, lo que al final llevó al PRD de Quintana Roo a ser un aliado del gobierno estatal.
El resquebrajamiento de la credibilidad del PRD se vio reflejado en los pasados comicios federales, cuando el Sol Azteca no superó ni el ocho por ciento de la votación en la entidad.
La salida de Julián del sol azteca era la crónica de una renuncia anunciada, pues el Gobierno del estado le cerró todos los caminos en el PRD, tras el control que obtuvo de ese partido, en las elección interna del 25 de octubre del año pasado.
Desde ese entonces, lejos de sumar, el PRD resta votos, resta militantes y resta liderazgos y se reduce a un partido de familiar.
Por una lado, se van los ‘Villatoros’ y los ‘Martínez’ con el PT, pero por el otro surge otro partido inminentemente familiar, con los ‘Ramos’ y los ‘Beristaín’, para consolidar una nueva franquicia política del estado.