Los efectos de la debilidad del peso frente al dólar comenzarán a sentirse en la segunda mitad del año y se verán reflejados en los sectores que dependen en buena medida de las importaciones, como es el caso del sector alimentario, alertó el director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), José Luis de la Cruz.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) el encarecimiento de la moneda estadunidense, que comenzó su tendencia a la alza en septiembre del año pasado, parece estar teniendo un efecto en las importaciones de productos agropecuarios que se pagan en dólares, las cuales cayeron 9.5 por ciento en los primeros cinco meses del año frente al mismo lapso de 2014.
Según cifras del Inegi, en los primeros cinco meses de 2015, la importación de alimentos como carne, leche y sus derivados, huevo, frijol, pimienta, chiles o pimientos secos, trigo, maíz, arroz, sorgo y algodón, entre otros, registró un monto de 4 billones 697 mil dólares, una caída de casi una décima parte frente a los 5 billones 196 mil dólares registrados entre enero y mayo del año pasado.
El especialista del sector privado consideró que otros de los sectores que pueden resultar más afectados serán el farmacéutico y el de comercializadores de maquinaria y equipo, cuyos productos, al ser comprados más caros en el exterior, pueden presionar al alza la inflación.
Según datos de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) esta semana las acciones de Genomma Lab, empresa dedicada a la comercialización y distribución de fitomedicamentos y complementos alimenticios, destacaron por tener uno de los mayores descensos al registrar una caída de 6.83 por ciento.
En entrevista, De la Cruz recordó que las coberturas adquiridas por las empresas para protegerse de la volatilidad del tipo de cambio las cubren por alrededor de seis o siete meses, pero el alza del dólar comenzó desde septiembre del año pasado.
“El gobernador del Banco de México ya empieza a alertar que podrían existir presiones inflacionarias o que esta turbulencia financiera pudiera afectar la economía”, dijo De la Cruz, luego de que este jueves el gobernador del banco central, Agustín Carstens, advirtió que el mundo está por ingresar en un periodo turbulento, asociado a las eventuales acciones de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).
Analistas del banco Ve por Más advirtieron que los reportes económicos en Estados Unidos de esta semana no fueron positivos, por lo que “crean temores de una desaceleración económica”.
Según un reporte del grupo financiero, los datos del desempeño manufacturero en el mundo han caído, especialmente el de China, que en julio tocó su nivel más bajo en 15 meses.
En la BMV el mercado accionario también cerró a la baja esta semana, con lo que siguió la tendencia de los mercados accionarios globales.
Prevén que la moneda llegue a 17 pesos por dólar; fracasa la política económica, señalan
La depreciación del peso frente al dólar podría agudizarse en lo que resta del año, debido a la proyección en los precios del petróleo, a partir de agosto y octubre próximo, con una tendencia a la baja, entre otros factores, advirtieron especialistas del Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM), de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En entrevista, estimaron que nuestra moneda podría depreciarse a 17 pesos por dólar al final de 2015, debido a que las proyecciones del crecimiento económico nacional “no irán más allá de 1.8 a 2 por ciento, por lo que creemos que las devaluaciones van a continuar”.
David Lozano, profesor de la Facultad de Economía, indicó que la inestabilidad del peso frente al dólar “será una constante, lo que impactará el ingreso de la mayoría de los mexicanos y en muchos sectores productivos que importan sus materias primas”.
Enfrentamos, aseguró, una “crisis financiera en forma” a lo que se suma un incremento en el número de personas pobres, que si se considera el impacto en la reducción de las remesas, el deslizamiento en el tipo de cambio, y la falta de generación de empleos y una pérdida de su calidad, “no serían 2 millones, como afirma el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), de nuevos pobres, sino 3.5 millones de mexicanos”.
En el CAM, indicó, “hemos hecho un análisis y consideramos como bajas las estimaciones difundidas por Coneval”. Explicó que si se considera la calidad en el empleo y las características de ingreso de los trabajadores en el país, “quienes no han enfrentado una disminución directa de su salario, lo han resentido en sus prestaciones”.
Aseguró que los especialistas del CAM han detectado que “al revisar a profundidad los datos del poder adquisitivo, de las prestaciones y de los efectos que ha tenido la reforma laboral en el bolsillo de los mexicanos, los ingresos de muchos mexicanos han empeorado”, y agregó que ante este escenario los sectores más vulnerables son las mujeres, los jóvenes y las personas de la tercera edad.
La actual política económica, dijo, es un “total fracaso”. Los datos oficiales, agregó, revelan que la actual administración federal pretende hacer un “recorte de sus programas, y varios de ellos impactan a la educación”.
Es evidente, subrayó, “que se debe cambiar la política económica, porque con la línea que se sigue actualmente es imposible disminuir la violencia y la marginalidad. Aparentemente se siguen destinando más recursos al combate a la pobreza, pero tenemos un mayor incremento en el número de pobres”. (Fuente: La Jornada)