MÉXICO.- Ni la intervención del Banco de México (Banxico), en el mercado cambiario logra estabilizar la depreciación del peso, que este día continuó su caída ante el dólar, al grado de alcanzar un nuevo mínimo histórico.
Al cierre de la jornada, el billete verde se vendió en 16.70 pesos en ventanillas bancarias. Mientras que a nivel interbancario, la moneda estadunidense se cotizó en 16.37 unidades, 0.63% más caro que la sesión del pasado martes, de acuerdo al Banco de México (Banxico).
El dólar se encareció ante el crecimiento del sector servicios de Estados Unidos que aumentó en julio a su mejor nivel en una década, impulsado por fuertes avances en la actividad empresarial, el empleo y los nuevos pedidos, de acuerdo al informe del Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM).
El ISM reportó que su índice del sector servicios subió a 60.3, el nivel más alto desde agosto de 2005. Dato que confirma un mejor comportamiento de la demanda interna norteamericana y que a su vez, anima a la Reserva Federal a incrementar sus tasas de interés.
Además de este dato, el dólar se fortalece ante los bajos precios del petróleo, la desaceleración económica en China, así como la incertidumbre financiera en Europa.
La semana pasada, la Comisión de Cambios decidió incrementar el monto de la subasta a 200 millones de dólares diarios, a través del Banxico, desde los 56 millones anteriormente ofrecidos ante la creciente volatilidad en el mercado cambiario.
No sólo eso, dicha comisión decidió disminuir el rango de depreciación de nuestra moneda a 1% desde el 1.5% de un día a otro, para inyectar otros 200 millones de dólares adicionales.
Mientras los mecanismos del banco central contienen la depreciación, la iniciativa privada alertó que se debe cuidar el impacto en la inflación por el ajuste en la paridad, dado que aún se espera algo de volatilidad en el tipo de cambio.
“Hay que recordar que alrededor de una cuarta parte de nuestras importaciones corresponden a insumos para la elaboración de productos que se comercializan aquí, que se quedan en la economía mexicana, ahí es dónde puede haber un impacto inflacionario”, señaló la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex). (Fuente: Proceso)