Las fuertes lluvias que cayeron este fin de semana en Quintana Roo y que aún siguen con variada intensidad, dejaron a varios precandidatos inundados, a otros mojados y a unos más salpicados, sin faltar los que resultaron beneficiados de rebote.
Entre los inundados estuvo el Alcalde de Othón P. Blanco, Eduardo Espinosa Abuxapqui que recibió un diluvio que hasta hoy mantiene colapsada a la ciudad de Chetumal y, aunque de inmediato movilizó a toda su gente, nomás no ha podido salir de la contingencia porque la cantidad de agua que cayó y la saturación del manto freático está más allá de sus posibilidades.
Paul Carrillo, el Alcalde de Cancún, fue otro de los damnificados de las inundaciones porque las lluvias lo cogieron fuera de base, es decir, mientras la ciudad que él dijo que ya no se inundaba se iba al agua, el precandidato a la gubernatura andaba en la grilla de la visita de Carolina Monroy en Chetumal.
Y desde que las redes sociales le hicieron ver su suerte, el Alcalde nomás se ha hecho chiquito para que no lo vean.
Pero también hubo precandidatos como el Alcalde de Solidaridad, Mauricio Góngora, que fueron beneficiados por las lluvias porque este municipio, sin resentir mayores problemas de inundaciones, fue incluido en la declaratoria de desastre que le proveerá de recursos del Fonden que habrá que cuidar que no acaben en la propaganda anticipada que desde hace meses trae porque en Playa del Carmen nomás no se ha visto el dinero que en otras ocasiones se ha destinado para estos fines.
Sin embargo, el precandidato más salpicado, y no precisamente por la lluvia, fue el secretario del Ayuntamiento de Isla Mujeres, Juan Carrillo, quien aspira a ser el próximo candidato del PRI a la alcaldía de este municipio.
Y es que resulta que en plena contingencia por el aguacero, que ayer domingo provocó al menos dos deslaves en la ínsula, uno de ellos en uno de los domos deportivos que puso en riesgo esa estructura, Juan Carrillo andaba haciendo amarres en un restaurante.
Uno de sus amigos presumió la foto en Facebook como si estuvieran haciendo algo importante, lo que provocó el inmediato enojo del Alcalde Agapito Magaña que no pudo contenerse y le soltó tremendo regaño público cuando les pidió que mejor salieran a trabajar y a ver qué necesitaba la gente.
Pero por si no fuera suficiente, el joven secretario de la comuna se puso su impermeable y salió a mojarse un rato sólo para presumir que ya estaba trabajando, en un boletín poco institucional manejado por su propio equipo de promoción en el que no incluyó los esfuerzos de la administración de Agapito Magaña contra las lluvias.
Así, Juan Carrillo exhibió el cobre, el poco apego a la comunidad que aspira a gobernar y, de paso, la poca lealtad a quien hoy es su jefe, el Alcalde de Isla Mujeres.
JUAN CARRILLO EN LA GRILLA Y EL REGAÑO DE AGAPITO
JUAN CARRILLO HACIENDO COMO QUE TRABAJA