No hay duda que el gobernador Roberto Borge se pinta solo para eso de las fiestas.
Ayer festejó en grande que Quintana Roo –el estado que gobierna- tenga el Primer Lugar de Impunidad de todo el País.
Y que mejor manera de celebrar, que teniendo como invitado especial al delegado de Sedesol, Fabián Vallado.
El joven aspirante a político se ha convertido en todo un monumento de la ilegalidad, al usar recursos de la Sedesol para fines partidarios, y de la impunidad, pues ya debería de ser, por lo menos, ex delegado.
Y Fabián estaba que no cabía de contento, al ser, ayer, uno de los protagonistas de la celebración del Día de la Amistad, que su mentor llevó a cabo en Kantulinkín.
Como aquella escena de ‘Goodfellas’, Fabián termina siendo protagonista de un festejo, luego de ser pillado en sus fechorías.