CANCÚN, MX.- En el tramo final de la administración municipal del Alcalde Paul Carrillo de Caceres en el Ayuntamiento de Benito Juárez, el regidor de Seguridad Pública y Tránsito, Alejandro Luna, dijo que están trabajando para aterrizar una propuesta para que el Ayutamiento de Benito Juárez pueda empezar a cobrar multas a los conductores detenidos en los retenes del alcoholímetro de manera preventiva con algún grado ebriedad, adicional al arresto de 24 a 36 horas que actualmente tienen que cumplir en el llamdo ’Torito’ de Cancún.
Sin embargo, explicó que se ha detectado que hay reincidencia, además de que en torno al ‘Torito’ ha florecido un negocio de trámite de amparos para evitar que las personas sean ingresadas en ese momento al Centro de Retención Municipal, a pesar de que eso no los exime se cumplir posteriormente con la falta administrativa si quieren recuperar su vehículo.
Actualmente, los conductores detenidos como parte de este programa, además del arresto, son obligados a pagar el arrastre de su propio vehículo en grúa, ya que no se les permite estacionarlo o que alguna otra persona no ebria se lo lleve, además de en muchos casos se les obliga a pagar multas adicionales por faltas administrativas de otra índole como no traer algún documento o, supuestamente, incurrir en una falta de respeto a los agentes de tránsito que lo detienen.
Es por ello que, adelantó el regidor, a modo de propuesta, se está trabajando en un nuevo tabulador para que el Ayuntamiento de Benito Juárez pueda cobrar a los conductores que caen en el alcoholímetro una nueva multa que castigaría más a quienes manejan con un porcentaje más alto de ebriedad.
Y es que dijo que actualmente el dinero que paga el ciudadano al ser detenido en el alcoholímetro no cae en las arcas municipales, si no se va al negocio de las grúas y al de los intermediarios que tramitan amparos, a pesar de que el programa, que se instauró por primera vez en el Distrito Federal, tenía y tiene un espíritu preventivo y no restrictivo.
Alejandro Luna reconoció que la “la corrupción existe en muchos aspectos”, pero no por ello el Ayuntamiento dejaría de cobrar las multas, además de que dijo que a los conductores se les debe dar un trato de delincuentes, porque, desde su interpretación, así lo estipula el propio Código Penal del estado.
El regidor trató de justificar la aplicación de esta nueva multa en el Artículo 186 del Código Penal del estado de Quintana Roo que a la letra dice:
ARTICULO 186. A QUIEN MANEJE UN VEHICULO DE MOTOR Y COMETA ALGUNA INFRACCION AL REGLAMENTO DE TRANSITO, HALLANDOSE EN ESTADO DE EBRIEDAD O BAJO EL INFLUJO DE ESTUPEFACIENTES, PSICOTROPICAS U OTRAS SUSTANCIAS QUE IMPIDAN O PERTURBEN SU ADECUADA CONDUCCION, SE LE IMPONDRA DE VEINTICINCO A DOSCIENTOS DIAS MULTA Y LA MEDIDA DE TRATAMIENTO QUE PROCEDA, SEGUN EL CASO.
SI ESTE DELITO SE COMETE AL PRESTAR EL SERVICIO, POR CONDUCTORES DE VEHICULOS DE TRANSPORTE ESCOLAR O DE SERVICIO PUBLICO DE PASAJEROS O CARGA, SE IMPONDRA DE SEIS MESES A UN AÑO DE PRISION O TRABAJO EN FAVOR DE LA COMUNIDAD DE UNO A TRES MESES, SIN PERJUICIO DE LA MEDIDA DE TRATAMIENTO QUE PROCEDA.
EN AMBOS CASOS SE APLICARA LO DISPUESTO EN EL ARTICULO 185.
El Artículo 185 dice:
ARTICULO 185. CUANDO SE CAUSE ALGUN DAÑO POR MEDIO DE CUALQUIER VEHICULO, MOTOR O MAQUINARIA, ADEMAS DE APLICAR LAS PENAS DEL DELITO QUE RESULTE, SE INHABILITARA AL DELINCUENTE PARA MANEJAR AQUELLOS APARATOS POR UN TIEMPO NO MENOR DE SEIS MESES NI MAYOR DE CINCO AÑOS. EN CASO DE REINCIDENCIA, LA INHABILITACION SERA DEFINITIVA.
Según el regidor, alguien que es detenido en un retén del alcoholímetro de manera preventiva y que se le detecta que conduce bajo algún grado de alcohol, debe ser considerado un delincuente porque incurre en una supuesta falta al Reglamento de Tránsito aunque no haya provocado daño o incidente alguno.
El regidor justificó que la sanción es para evitar que haya reincidencia.
Dijo que además, se les debe inhabilitar la licencia al conductor y obligarles a recibir pláticas de concientización, pero acompañada de la multa “para que verdaderamente le impacte a su bolsillo” y para que genere en él la conciencia de no volver a manejar en estado de ebriedad.
Contradictorio, afirmó que “cien por ciento el programa (del alcoholímetro) seguirá siendo preventivo y no restrictivo”, pero señaló que están “trabajando” en generar esa “conciencia” vía las multas, pero que al final del día no le afectará al que toma y es responsable y opta por subirse a una taxi o cede el volante a una persona que no haya consumido bebidas embriagantes. (Noticaribe)