Félix González Canto ha pasado a la historia como el gobernador que ha puesto a dos candidatos del PRI a gobernadores.
Aunque, en realidad, Félix ya está desde hace mucho inscrito en la posteridad, como el gobernador que quebró y llevó a la ruina estado.
Tal fue el desastre financiero que dejó, que no tuvo más remedio que dejar como gobernador a un joven inexperto e inescrupuloso como Roberto Borge, cuyo desastroso gobierno terminó por eclipsar el quebranto dejado por González Canto.
A lo largo de su sexenio, Borge no pudo quitarse la tutela de su antecesor, que le impuso a su gente en los principales sitios del gabinete, en particular, en los que se manejan los dineros del estado.
Se pudo decir que a lo largo de estos cinco años hubo dos gobernadores: Uno que ejercía el control y otro que se mantuvo en el descontrol.
Las cosas, llegaron al extremo, que ‘Beto’ Borge ni siquiera supo que no tuvo el control de su sucesión. Que como en otras ocasiones, sus excesos, los llevaron a fracasar.
Cuando Félix González era gobernador oficial, no tuvo el empacho de dejar muy en claro que su ‘delfín’ era Roberto Borge. Lo encaminó, en la segunda parte de su sexenio, haciéndolo presidente del PRI y diputado federal.
‘Beto’ Borge quiso hacer algo similar con José Luis ‘Chanito’ Toledo. En la segunda mitad de su administración, lo hizo presidente de la Gran Comisión y diputado federal.
Pero, falló estrepitosamente y quedó Mauricio Góngora, el candidato de Félix González Canto.
La prensa metropolitana resalta que el viernes pasado, el día del ‘destape’, Borge aún estaba en la sede del PRI con ‘Chanito’.
‘Beto’ Borge no es muy dado a las formas. Vestía de camisa roja, en actos de Felipe Calderón, o tomaba el micrófono en los informes de gobierno municipales. No se entiende porque no estaría en el registro de Mauricio Góngora.
Pero si estuvo su antecesor. Junto con Mauricio, Félix, fue la estrella del domingo priista.
Y frente al fracaso de Borge, ahora se quiere ‘borgizar’, mediáticamente, a Mauricio. Mucha tinta para defender lo indefendible.
Pero Mauricio es totalmente ‘felixista’, pero esta etiqueta no significa un ‘extra’ para el ex alcalde playense.
Para efectos prácticos, si Mauricio es ‘felixista’ o ‘borgista’, es como lo mismo. Mauricio tendrá que remar contra corriente…
Si las segundas partes nunca fueron buenas, se ve más complicado con las terceras.