La presidencia municipal de Solidaridad se ha vuelto algo así como un apetecible premio de consolación entre los actores del tragicómico episodio de la sucesión priista.
Aparentemente había sido pactada para Filiberto Martínez, como pago a la traición a Carlos Joaquín González.
Sin embargo, las cosas empiezan a cambiar, sobre todo cuando Roberto Borge ha iniciado su declive, por cierto, de manera precipitada y en una ruta demasiado empinada.
La cosa es que a pesar de la foto del ‘besamanos’, Mauricio no quiere nada con Filiberto, al que no lo puede ver ni en pintura. De hecho, le mandó un mensaje este lunes.
Pero el episodio no acaba ahí, sino que además Mauricio supone que debe de cuidarse muy bien las espaldas –por aquello de las malditas dudas-, y poner alguien de sus enteras confianzas.
Por si faltara algo, Gabriel Mendicuti está amagando que se va a ir a la coalición PAN-PRD, por lo que para retenerlo, en el portafolio de ofertas, está la presidencia municipal de Solidaridad.
Y además, está un grupo de mujeres como Teresita Flota –hermana de Pedro Flota y Ángela Sánchez, por aquello de la paridad en los ayuntamientos de planillas impares.
La selección de los candidatos a alcaldes en el PRI puede ser también muy traumática.