En las tres columnas que forman la alianza ‘UNE’, ya no saben para que equipo juega Eduardo Martínez.
Se entendería que debería de jugar para la coalición y, en especial, para Carlos Joaquín González, que es el 9 de este equipo.
Pero, Eduardo Martínez en su papel de jefe político del PAN estatal, en lugar de reforzar el equipo, pretenden debilitarlo, en lo que se refiere a las aportaciones blanquiazules en la selección opositora.
Que para empezar, Eduardo quiere bajar a Perla Tun en Cozumel y poner a Adriana Teissier Zavala.
Pero además, ha ‘vetado’ a Alicia Ricalde en Isla Mujeres y a Domingo Flota, en José María Morelos.
Pero, la cosa no para ahí, quiere imponer como diputados a los ex regidores Mayuli Martínez, Fernando Zelaya (Othón P. Blanco) y Víctor Sosa Santoyo (Solidaridad).
La preocupación es que los convocados por Eduardo Martínez poco o casi se les escuchó contra Roberto Borge y, en el caso de Sosa Santoyo, la cosa es una más extrema, pues no fue precisamente un regidor combativo en el cabildo playense, presidido por Mauricio Góngora. Es más, parecía uno de los más mauricistas de todos y eso ya es mucho decir…
Y en medio de este desbarajuste táctico, quien se supone era un refuerzo de lujo, el delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, Juan Pablo Adame Alemán, es algo así como un cero a la izquierda.
La estrategia de la alianza UNE consiste en un equipo ‘Anti Sistema’, pero las señales establecen que Eduardo Martínez quiere meterles un gol con ‘felixistas’, ‘borgistas’ y hasta ‘mauricistas’.