Javier Fernández, papá de Daphne, difundió el audio de una conversación que sostuvo con los padres de los agresores de abuso sexual de su hija, en que aceptan la culpa de los llamados ‘Porkys’ en redes sociales.

El material corresponde a una de las reuniones que tuvo lugar el pasado 29 de abril con los padres de Enrique Capitain, señalado por violar a Daphne. En ese encuentro Ricardo Fernández –otro de los implicados-, amigo de Javier, afirma a Enrique Capitaine y Jacky Marin, padres del joven:

La noche del 3 y 2 de enero, Enrique violó a la hija de Javier, en tu casa”.

Tras una serie de señalamientos y puntos sobre los motivos, disculpas y aceptación de los cuatro jóvenes, los padres de Jorge Cotaita Cabrales, Diego Cruz Alonso y Gerardo Rodríguez Acosta, aceptan la culpabilidad de sus hijos.

Durante la conversación, Alicia Cabrales, madre de Jorge Cotaita, se dice asombrada: “No lo puedo creer, en serio mi hijo, vaya. No sé. No puedo creer que haya actuado así. Mi hijo es una persona caballerosa, lo ves en su trato diario; no lo puedo pensar, ya ahorita entiendo que no es así”.

Un pequeño silencio y luego lanza el cuestionamiento “¿Cómo puedo entender que es el monstruo que se está armando si yo convivo con él? Imagínate la decepción que tengo, de que me dedico al cien para ellos. Mi hijo tiene 17 años y está en el ojo del huracán”.

Mientras que el padre de Jorge, también se dice sorprendido del hecho.

“¿Cómo pudieron hacer eso? Llegan a las 3 de la mañana a la casa, van con 9 de promedio, cabrón. No es posible. ¿Dónde tienen esa malicia? Y decir que no, que nada más estuvieron que acompañaron, que hicieron, no es posible. Son unos chacales, eso es ser chacal”.

Y sentencia:

“Se atienden a las consecuencias y hacen lo que el padre dice… Si no van a la cárcel cabrones, esa madre no se hace. […] No hay castigo para eso porque ni la cárcel lo soluciona, el daño está hecho y eso no tiene vuelta de hoja”.

Mientras que Héctor Cruz, padre de Diego, afirma que impondrá un castigo.

Había que ver el restaurar esto, el darle una resanadita de alguna manera. Sabemos ya bien cómo estuvo todo el asunto, escarbarle por ahí está más cañón […], pero yo voy a castigar a mi hijo”. (Fuente: Excélsior)

Comentarios en Facebook