Mauricio Góngora se confirma como el candidato de la continuidad de Félix González y Roberto Borge.
Y aunque asegura que no tiene padrinos, sigue a pie puntillas los estilos y las maneras de su mentor y de su ‘hermano’.
Ya muy pronto se cumplirá el plazo para la organización de los debates.
Y nomás Mauricio no da señales.
No hay voluntad para un debate y, como diría ‘Don Teofilito’, ni lo habrá porque Mauricio no le quiere entrar a temas como la deuda, la asfixia financiera, las violaciones a derechos humanos y todo el desastre que han dejado el actual y el anterior gobierno.
Parecería que su mejor defensa, es el silencio.
Las cosas han llegado al extremo que ha condicionado las entrevistas a reporteros. Antes, los trabajadores de los medios de comunicación tienen que pasar una especie de aduana y, claro, las preguntas tienen que ser a modo.
Más que una campaña, es el monólogo de Mauricio.