Casi todos los candidatos a presidentes municipales están con ‘el Jesús en boca’, por los topes de campaña, sobre todo en el caso de Benito Juárez.
Por esos extraños casos de la aritmética electoral, a todos los municipios les toca un tope de campaña de 404 mil 417 y 50 centavos.
Lo mismo es para Cancún con 523 mil electores que a Puerto Morelos, con sólo 12 mil.
Sin embargo, para el candidato del PES, Gregorio ‘Greg’ Sánchez, el tema de los topes de campaña es lo de menos.
‘Greg’ no ha tenido límites y lo mismo se anuncia en camiones urbanos, que periódicos, por cierto, algunos muy, pero muy afines al Gobierno del estado.
La Ley es muy clara: el rebase de topes de campaña es causal para anular ‘triunfos’.
Por eso todos o, mejor dicho, casi todos, están cuidando peso por peso.
Y por supuesto que ‘Greg’ no juega a ganar. Su juego es otro. Lo mandaron a dividir.
Por eso, a ‘Greg’ lo tiene sin cuidado si rebasa los 404 mil 417 y 50 centavos de tope de campaña.
Y es ineludible evocar a aquel filósofo del Sureste: “¿Quién pompó?”