¿Por qué no le creo a José Luis Pech?
Siempre procuro conducirme con objetividad y que las acciones profesionales sean las que guíen mis comentarios y opiniones. He señalado puntualmente cuando he tenido o no acercamiento con uno u otro personaje. En esta ocasión no será diferente hablaré de las razones por las cuales yo no creo la actuación en su papel de oposición del Dr. José Luis Pech Varguez, aclarando que no lo conozco de manera personal.
Pero, no lo conozco porque cuando fue Rector y yo estaba concursando para obtener el Premio Estatal de la Juventud me pedían una carta de recomendación por parte de una Institución Educativa; así que acudí a su oficina, pedí audiencia, expliqué mis razones, di mil vueltas y el señor Pech jamás me recibió, siempre me decían que estaba de viaje, en congresos y reuniones mucho más importantes que atenderme. Ante esto, expliqué a su secretaria mis razones y anexé mi Curriculum y una propuesta de carta para que no “perdiera” su importante y valioso tiempo en algo tan superficial como lo era mi solicitud.
Aún así seguían pasando las semanas y jamás lo hizo. Posterior a eso envié una carta (que prometo publicar en algún momento) y con copia a los principales medios de comunicación, además de meter una solicitud por medio de transparencia para conocer el monto, número de viajes y resultados de cada uno de ellos en beneficio de la Universidad del entonces Rector. De manera increíble, en menos de un día el documento estaba firmado y mi solicitud de trasparencia archivada. Así que, esta es la razón por la cual no conozco al Dr. José Luis Pech, porque nunca tenía tiempo de recibir a nadie.
Yo no le creo su espontanea actitud combativa, ni sus señalamientos, no le creo su honestidad, puesto que su campaña no ha señalado los logros y resultados de manera concreta que ha tenido en sus cargos, ni lo hará, porque no hay.
Yo no le creo porque ha señalado de manera tibia el endeudamiento y falta de transparencia en los últimos sexenios. Lo entiendo él también fue parte, el revisar las cuentas públicas y el haber sido Secretario de Educación con Félix González, Hacienda y Gobierno con Hendricks, así como en su función de Rector en el primer año con Roberto Borge Angulo. A él tampoco le conviene que se revise el manejo de recursos.
Sus argumentos solo pretender desviar su propia participación y en varias administraciones en especial durante el Gobierno de Hendricks, cuya gestión fue desastrosamente destacada por la Megaescultura y las millonarias esculturas que hoy sigue “adornando” con chatarra nuestra bahía de Chetumal.
Una persona con los estudios y experiencia con que los que cuenta el Dr. José Luis Pech me resulta increíble que reduzca su debate a una filiación partidista y a juicios de valor sin pruebas, me resulta demagógico desprestigiar a un funcionario por ser partidario de la doctrina del PRI, el cual es socialdemócrata y al menos en documentos en la búsqueda de la justicia social. Pero, si lo hace, también debe señalar cuál es la corriente ideológica que defiende. Conozco muchos militantes de este partido a los cuales les reconozco su rectitud y trayectoria. Además me parece sufre de amnesia y falta de autocrítica pues él mismo siempre ha militado en este partido y lo digo en presente porque hasta hoy no ha presentado ni su renuncia ni los motivos para hacerlo.
Yo no le creo al Dr. José Luis Pech Varguez, porque tampoco se ha deslindado de Félix, quien cuando lo nombró Rector (puesto que no tenemos una Universidad Autónoma), se le reconoció como un destacados felixista.
Yo no le creo porque dentro de los pocos logros como Rector otorgó la distinción Doctor Honoris Causa al exgobernador Miguel Borge Martín acto para mí de lo más servil pues se realizó en 2010 cuando el sobrino del galardonado, Roberto ya era Gobernador electo.
Yo no le creo porque no ha presentado su declaración patrimonial y agregar también las que debió de haber realizado durante los años en su gestión al frente de la Rectoría de la UQROO, ya que el dirigir esa Institución con el presupuesto que se le asigna y la discrecionalidad para su manejo son acciones que debería aclarar. Son más de 200 millones por año, mucho más que muchas Secretarias de Estado, después de Góngora de los aspirantes, es Usted quien más presupuesto ha manejado en su trayectoria.
Fue señalado en diversos medios en su momento como uno de los peores Rectores de la Universidad, porque existieron generaciones enteras que nunca tuvieron contacto con él, porque en su gestión reprimió a destacados académicos como Xavier Gamboa por la intención de crear un Sindicato, este hecho fue denunciado y la autoridades judiciales le dieron la razón al docente teniendo que reintegrar nuevamente a la Institución.
Yo no le creo a José Luis Pech, porque su actuar ha sido descaradamente de complicidad tratando de engañar para dividir el voto de castigo cuando siempre ha contado con el apoyo y anuencia ante el gobierno actual.
No le creo porque su única propuesta es tomarse la foto con Andrés Manuel López Obrador. Porque he sido testigo de las facilidades que se le han dado para realizar sus eventos. Porque en el Gobierno actual de Quintana Roo, los odios son manifiestos. Muchos amigos han sido amenazados, despedidos y vigilados para no manifestar un apoyo a Carlos Joaquín, pero hasta el momento no ha habido una sola represalia para quien apoya a José Luis Pech.
Yo no le creo porque he sido testigo de cómo manifestar la simpatía a Carlos Joaquín da como consecuencia un acoso y persecución no sólo a tu persona sino a los miembros de tu familia y con mayor razón si trabajan para el Gobierno. Sin embargo, su hijo José Luis Pech Galera (a quien hace algunos años tuve la oportunidad de conocer y a quien tengo en un buen concepto como un joven, accesible, capaz e inteligente, sin por ello hacer un juicio sobre su gestión), fue nombrado por Roberto Borge Ángulo como Rector de la Universidad Politécnica de Quintana Roo sin que la supuesta oposición al sistema de su padre influya hasta el momento en la destitución o persecución alguna.
Yo no le creo al Señor Pech, porque poco o nada ha hecho cuando varios militantes del partido que lo postula han “desertado” en favor del PRI, si en verdad quisiera ganar sería más lógico que escuchara sus propios seguidores y convencerlos de continuar en su proyecto.
No le creo porque después de tantos años al frente de una Universidad, la comunidad académica y estudiantil no le ha manifestado su apoyo. Muchos ejemplos podría dar como el caso de José Vasconcelos cuando fue candidato presidencial, en donde los jóvenes se volcaban a las calles con el arrojo que sólo la juventud otorga para unirse a él, sin embargo, es tanto el respeto y admiración por Vasconcelos que jamás lo rebajaría en tan indigna comparación.
¿Por qué ahora los medios de comunicación que el mismo Gobernador ha señalado como “oficiales”, le dan una cobertura sólo comparable con Mauricio Góngora?
¿Por qué lejos de precisar y aclarar estas dudas respecto de su auténtica oposición señala cuestionando al principal opositor de Mauricio Góngora? Pareciera que es el Partido Verde quien lo postula y no Morena.
No señor, yo no le creo porque su discurso y su trayectoria dicen lo contrario. Y lo más importante, yo no le creo su “cercanía a la gente”, porque si cuando fue Rector nunca pudo recibirme que podría esperar al ser Gobernador.
Lo más destacado de José Luis Pech fueron sus múltiples viajes al extranjero con cargo a la Universidad de Quintana Roo con el argumento de que eran en beneficio de la Institución. Estos últimos cinco años hemos tenido un Gobernador que ha viajado mucho más que el Presidente de la República, sin resultados ¿Qué lo haría diferente a Usted?
Después de casi diez años de aquella carta que le escribiera por su falta de sensibilidad y apoyo hoy sigo pensando lo mismo. Sus acciones confirman la imagen que tenía de Usted.
Y no, yo no acuso al señor Pech por ser priista, lo acuso por ser opaco, por tener un discurso demagógico, por no ser autocrítico, por evadir su responsabilidad y la justificación de sus acciones. Lo acuso de utilizar a quienes quieren un cambio por un hartazgo manifiesto en la división del voto para sostener a un grupo en el poder a quien tanto Usted le debe.
No señor, José Luis Pech Varguez, yo no le creo. Y espero que muchos más adviertan esto y tampoco le crean, la única forma de cambiar el rumbo es uniendo no dividiendo como lo está haciendo hoy, el candidato de Morena.