AKUMAL, MX.- La Profepa clausuró, por impacto ambiental, instalaciones del Restaurante la Buena Vida con Tienda de buceo y actividades acuáticas Akumal Dive Adventures, así como a los predios conocidos como Tlalocan y Nah Nah, en el municipio de Tulum.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), señaló que como resultado de operativos de inspección por parte de elementos de la oficina regional en la entidad, se comprobó que las obras no cuentan con las autorizaciones expedidas por Semarnat para establecerse y operar en la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat).
Indicó que en atención de diversas denuncias públicas en medios de comunicación y redes sociales, la Profepa inició los trabajos de inspección a las instalaciones del hotel Villas Akumal, a fin de determinar el grado de afectación y deslindar responsabilidad por la descarga de aguas negras en humedales de manglar.
En un comunicado, indicó que este último desarrollo turístico forma parte de las casi 120 acciones de inspección y regularización con que arrancaron las tareas de la nueva oficina regional de la Profepa en el municipio de Tulum, inaugurada en fechas recientes.
Señaló que el Restaurante la Buena Vida con Tienda de buceo y actividades acuáticas Akumal Dive Adventures, ya había sido sancionado anteriormente por la procuraduría en 2005.
Expuso que ello, por obras en el lote 36, sin embargo, continuó con una ampliación ilícita en el lote 35, donde construyó en 891 metros cuadrados una alberca, tienda de buceo, regaderas y corredores, motivo por el cual fue clausurado.
Dijo que el predio Tlalocan es una casa de turismo, en la que en dos mil 243 metros cuadrados se construyeron una alberca, muretes, jardines, pasillos y palapas en la Zofemat, sin contar con autorización de impacto ambiental, motivo por el cual dichas obras también fueron clausuradas.
En el desarrollo Nah Hah construyeron una estructura de entrada, dos jardineras, una vivienda, dos bardas, dos muretes, una alberca, una caseta y una fosa con descarga irregular de desechos líquidos que fueron clausurados por el impacto ambiental que provocan a la Bahía de Akumal.
Inspectores de la oficina regional de la Profepa constataron que los tres desarrollos afectaron los ecosistemas de matorral y duna costera observando especies vegetales de importancia ecológica como la palma kuka (y palma chit, especies enlistadas en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010.
Cabe destacar que los ecosistemas afectados junto con el manglar son parte de la biosfera terrestre que cubren una franja fronteriza entre el mar y el continente y protegen a la región de embates naturales como los huracanes, y refugio de especies como la iguana rayada que deben ser protegidas.
La Profepa indicó que las afectaciones causadas pueden ser sancionadas hasta con 50 mil salarios mínimos de acuerdo con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, además de implementar las medidas de mitigación y restauración que imponga la propia Procuraduría. (Fuente: Notimex)