CIUDAD DE MÉXICO.- Con 264 votos a favor, Alejandra Barrales es la nueva presidenta nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En segundo lugar quedó el representante del sol azteca ante el Instituto Nacional Electoral (INE), Pablo Gómez, con 58 votos; sólo se reportaron dos votos nulos.
Barrales renunció el viernes a su cargo como Secretaria de Educación del Gobierno de la Ciudad de México.
Alrededor de las seis de la tarde, la perredista rindió protesta como presidenta nacional ante el pleno del Consejo celebrado este sábado.
En su mensaje como nueva lideresa del sol azteca, la exsecretaria de Educación de la Ciudad de México afirmó que hoy se realizó un verdadero ejercicio de la democracia.
Añadió que esta victoria es un gran reto y una enorme responsabilidad. “Es tiempo de pensar que lo imposible sí es posible”.
Barrales llamó a “caminar en unidad” y recuperar el papel como oposición responsable para rescatar al país.
“Respetando nuestras diferentes visiones y en unidad podremos construir una ruta para nuestro partido”, sostuvo.
“Hoy los perredistas estamos llamados a ponernos a prueba, si queremos ser una alternativa real para la gente, tenemos que dar ese paso, tenemos que actuar de manera diferente”.
Antes, Pablo Gómez destacó que su participación como eventual candidato a la presidencia nacional fue propuesta por Héctor Bautista. “No sé por qué después cambió de opinión”, le reclamó en el pleno.
De lo que sí dijo estar seguro es que esta competencia no era entre personas, sino entre ideas políticas. El partido dentro de su crisis, dijo, no va a renacer poniendo parches y más parches.
“Tenemos una línea política que no está publicada, mucho menos difundida, mucho menos defendida y mucho menos acatada. Ahí está, en algún cajón de la burocracia del partido. No tenemos una dirección unida, institucional. No tenemos una dirección leal al partido, porque cada quien tiende a hacer la política a su manera, con sus objetivos y a tener, incluso, la interlocución propia con el poder”, acusó.
Añadió que su propuesta era acatar la línea de la mayoría, construir un núcleo de dirección. Su discurso provocó algunos aplausos.
“Estamos sometidos a los poderes establecidos. Estamos en la lucha de ser un poder nuevo. Esa es la profundidad de la crisis de este partido.
Gómez consideró que la idea de su candidatura era frenar la pérdida de independencia del PRD frente a los poderes públicos.
“Y nos han respondido con la más fuerte acometida de pérdida de independencia. Nosotros no somos el PRI donde el presidente pone a uno de sus colaboradores de la presidencia pero eso es lo que ahora se intenta hacer aquí. Y eso no importaría si se tratara de personas, se trata de dirigir el partido desde fuera, por personas ajenas que tienen vínculos no solamente con su propio gobierno, como es natural, sino con el gobierno de la República”, indicó.
Se debe reconquistar la postura moral que han perdido, añadió.
“Por eso hemos llegado al final del partido que surgió como el más independiente en su momento.
“La propuesta que se nos hace desde las corrientes es que dejemos de ser independientes”, apuntó. (Fuente: Proceso)