Por Vicente Martín | PeriodistasQRoo
CHETUMAL, MX.- La actuación del joven othonense Alberto Álvarez Muñoz ha colapsado las redes sociales en Quintana Roo y con los amantes del atletismo en el país, ya que se calificó a la final del Salto Triple en los Juegos Olímpicos de Río.
Mensajes de felicitación y admiración para el joven Álvarez Muñoz se pueden leer a través del Facebook, reconociendo el logro de haber calificado a la final y poder aspirar en la lucha de las medallas.
Pero la historia de este éxito es de un guion de película, ya que sin donde entrenar, porque Chetumal, su ciudad natal, no contaba con una pista con condiciones aceptables, tuvo que emigrar y buscar nuevos horizontes.
Estando en estas tierras logró dar la sorpresa en el 2011, cuando calificó a los Juegos Panamericanos de Guadalajara, lo que asombró a los directivos de la Federación Mexicana de Atletismo quienes estaban enterados de su situación, que no contaba con un lugar digno para prepararse.
Estando en la élite del porte nacional, los apoyos en Quintana Roo para poder cumplir con el calendario de competencias no fluían con facilidad y la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) le ofreció una beca deportiva para cursar una carrera, representarlo en las Universiadas y contar con una fosa de salto en donde buscar sus sueños, pero el todavía representaba a Quintana Roo en los eventos nacionales.
La Comisión para la Juventud y el Deporte de Quintana Roo (COJUDEQ), a través de su área administrativa que encabeza el eterno director José Luis Irizzont Marrufo, se olvidó o no quiso apoyarlo con un boleto, ya que tenía que acudir a una competencia nacional clasificatoria a evento internacional. Esa fue la gota que derramó el vaso.
El día que tenía que viajar, llegó al aeropuerto y al tratar de registrarse como siempre lo hacía, le informaron que no tenía boleto. El destacado atleta cayó en la desesperación y nostalgia por el hecho, situación que aprovechó el estado regio, que le ofreció el apoyo negado en su tierra, por lo que no le quedó más que aceptar.
Con tristeza por lo acontecido y la desesperación de que no iba a viajar a su competencia, aceptó la oferta de Nuevo León para ya no estar batallando con preocupaciones de que si iba a ir o no a su próximo evento. Encontró más apoyo en otro estado, que en casa, donde se había formado.
Hoy es orgullo de todo México y los reflectores lo están enfocando por su hazaña. Este martes 16 de agosto a las 7:30 de la mañana estará buscando tener una histórica actuación, cuando esté peleando las medallas del Salto Triple. (Fuente: Periodistas Quintana Roo)