CANCÚN MX.- La instalación de la XV Legislatura del Congreso de Quintana Roo, la elección de los integrantes de la Gran Comisión –ahora en manos del PAN, PRD, Morena, PES y Panal- y la designación de las 25 comisiones ordinarias que conforman el parlamento local, dejaron un serio lesionado, moribundo, casi en coma: el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El sábado, al instalarse la Mesa Directiva para el Primer Mes de Sesiones, el PRI, junto con su aliado el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), sufrió su primer descalabro, cayendo ante la propuesta del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que, como dirían en el beisbol, le ganó el segundo de la serie con contundencia el lunes cuando se integró la Gran Comisión, dejando fuera, por primera vez en 40 años, al tricolor fuera del control del Congreso Local, del dinero, de la posibilidad de modificar leyes a su antojo, a su beneficio.
Y es que apenas el domingo pasado, Juan Carlos Pereyra renunció a 14 años de militancia en el tricolor, tras considerar que existen situaciones que afectan la imagen del PRI, eso sí, enfatizó que no traicionó al instituto político.
A esto, se suma la “sorpresiva” ausencia en la Primera Sesión Ordinaria de este lunes de la legisladora priista por el distrito 2 (asentado en Cancún), Candelaria Ayuso Achach, -hija de la ex alcaldesa benitojuarense Magaly Achach- quien justificó su falta por una “gastroenteritis con deshidratación salmonelósica”, e incluso, fue el líder moral del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) Jorge Emilio González Martínez, el otrora Niño Verde, quien acusó la inasistencia de Candy.
Por la noche del lunes, Candy Ayuso envió un comunicado de prensa en el que aseveró que continúa como diputada del PRI y que está comprometida con las acciones que determine su partido. “Lamento mis condiciones de salud, pero como diputada del PRI considero que habremos de tener una estrategia conjunta”, escribió en el documento.
Ante esa situación y en clara alusión a ambos parlamentarios, el todavía líder estatal priista y diputado local, Raymundo King de la Rosa, advirtió que serán expulsados los simuladores y los traidores. “No podemos dejar que la división y las posturas encontradas debiliten al PRI y le faciliten el trabajo a los partidos opositores, por lo que se expulsará toda simulación y traición”, sentenció.
Al parecer la renovación de la dirigencia del PRI en la entidad no será el único problema que enfrentará Raymundo King, sino también una bancada dividida, dudosa y titubeante por continuar la dinámica que emprendió el gobernador Roberto Borge Angulo, promovida como una orden por King de la Rosa, quien a tan sólo cuatro días de haber sido instalada la XV Legislatura, se ha quedado prácticamente solo y sin poder de convocatoria y negociación. (Noticaribe)