CHETUMAL, MX.- “Por 50 años hemos demostrado que la unión entre la sociedad y sus fuerzas armadas ha sido fundamental para vencer cualquier adversidad; así lo hemos hecho y así lo seguiremos haciendo”, manifestó el jefe del estado mayor de la 34 zona militar, Gerardo Wolburg Redondo, en su mensaje con motivo de la celebración del 50 aniversario de la implementación del Plan DN-III-E.
Recordó que a lo largo de la historia, México ha sufrido los embates de inumerables desastres, tanto naturales como causados por la mano del hombre, los cuales han resultado en la pérdida de vidas, daños a la infraestructura nacional y al patrimonio de la ciudadanía, lo que ha precisado que el Ejército y fuerza aérea, con base en la experiencia adquirida en la prevencion, auxilio y recuperación de las zonas afectadas por estos fenómenos, desarrollaran un procedimiento para hacerles frente, el Plan DN-III-E.
El despliegue permanente de personal militar de tierra, mar y aire en todo el territorio nacional, permite prestar ayuda oportuna en donde se necesita y hoy, “ante la nación, refrendamos nuestra firme vocación de servicio y compromiso por seguir cumpliendo la elevada misión de salvaguardar la vida y el patrimonio de las familias mexicanas en coordinación y cooperación con los tres niveles de gobierno, organizaciones civiles y la ciudadanía en general… sin dilación, sin titubeos y con presteza acudiremos a su llamado”, enfatizó.
Afirmó que en la actualidad las fuerzas armadas nacionales disponen de la organización y capacidad necesarias para evacuar a la población afectada, establecer refugios temporales, centros de acopio, cocinas comunitarias, integrar células de búsqueda y rescate, servicio médico, apoyo de ingenieros y seguridad, establecer puentes aéreos para el transporte de personas, equipo y abastecimientos en las zonas de difícil acceso, lo cual coadyuva a que las afectaciones de los diferentes fenómenos sean minimizadas.
Señaló que el estado de Quintana Roo, por su ubicación geográfica y tipo de terreno, ha sido objeto de importantes fenómenos meteorológicos y el plan militar de auxilio a la población en caso de desastres, se ha tenido que implementar en varias ocasiones, tal como ocurrió al paso de los huracanes ‘Carmen’ en 1974, ‘Gilberto’ en 1988, el cual devastó la costa norte del estado, ‘Isidoro’ en 2002, que causó estragos tanto en el norte como en el centro del estado, y el huracán “Wilma”, en octubre del 2005, que muchos todavía recuerdan.
La participación del personal militar va más allá de los fenómenos hidrometeorológicos, el plan DN-III-E también se aplica en casos de incendios, explosiones, erupciones, derrames y terremotos, como el de 1985 en la Ciudad de México, señaló.
Ddurante un evento realizado en las instalaciones de la 34 Zona Militar en Chetumal se hizo un reconocimiento a los 48 militares que en el cumplimiento de su deber, han entregado su vida tratando de salvar la de otros; ellos son los héroes del presente y merecen ser recordados con honor.
Así como tambien a todos aquellos ciudadanos que de manera valiente y con grandes deseos de ayudar, se unen a las actividades de auxilio y apoyo; a los mexicanos “que siempre nos han manifestado afecto y confianza, les expresamos nuestro mayor agradecimiento”, subrayó.
El evento estuvo encabezado por el comandante de la 34 zona militar, Ernesto Martínez Rescalvo; el comandante de la 11 Zona Naval, Carlos Manuel Monforte Brito; el secretario de Seguridad Pública, Rodolfo del Angel Campos; y el presidente municipal, Luis Torres Llanes. (Noticaribe)