No se sabe si es obra del mega software o los fantasma del pasado, pero a la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) le salió el tiro por la culata en el cobro de las placas.
Y es que si bien hubo ‘descuentos’ para el reemplacamiento 2017, el nuevo ‘sistema’ arroja diversas multas y recargos, que hay que pagar porque hay que pagar.
En el pasado reciente, había la posibilidad de negociar descuentos a las multas y/o recargos o pago a plazos, pero el nuevo ‘sistema’ es inflexible. O los contribuyentes pagan todo o pagan todo. Y el ‘sistema’ es operado desde Chetumal.
Muchos de los contribuyentes prefieren darse la media vuelta y dejar el reemplacamiento para cuando en Sefiplan empiece a haber algo que se llame sentido común.
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Peor aún es para los que desde el año pasado, y sin que aún se aprobara el paquete fiscal 2017 en el congreso, ya nos habían cobrado el reemplacamiento por adelantado. Y cuando se anunció el descuento y fui a solicitar un reembolso me dijeron que simplemente no se puede, lo caído, caído.
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