Por Julio César Solís
CANCÚN, MX.- La senadora del PRD, Angélica de la Peña Gómez, enfatizó que a nivel internacional México pretende maquillar los casos de tortura que se dan a diario a manos de las propias autoridades, por lo que cuesta trabajo resolver el problema por la resistencia del gobierno en aceptarlo.
En el marco de su Cuarto Informe de Labores Legislativas realizado en Cancún, donde estuvo presente el líder estatal del PRD, Jorge Aguilar Osorio, la senadora, quien preside la Comisión de Derechos Humanos en la Cámara Alta, indicó que pese a que México no se encuentra en guerra civil ni enfrenta a ningún enemigo externo, se sienten los estragos de la tortura, de las ejecuciones extrajudiciales, de las detenciones arbitrarias y de las desapariciones forzadas.
“México no es un país con guerra, no tiene una guerra civil, no está enfrentando a ningún enemigo externo, sin embargo los estragos que tenemos en tortura, en ejecuciones extrajudiciales, en detenciones arbitrarias, en desapariciones forzadas, es muy alto. Está costando mucho trabajo resolver el asunto porque hay resistencia para aceptar la realidad y entonces México siempre se cuida a nivel internacional de no ser fiscalizado; se pretende maquillar que se está exagerando por parte de los organismos internacionales”, precisó.
Expuso que la tortura no sólo se centra en las acciones que emprenden las corporaciones policiacas, sino que va desde los malos tratos hasta las condiciones inhumanas que imponen las autoridades.
“La tortura no sólo se encuentra en las acciones que emprenden las corporaciones policiacas, cuando el relator de Naciones Unidas, Juan Méndez, señala que en México hay tortura generalizada se refiere a que la forma cómo se conducen las autoridades van desde malos tratos, condiciones inhumanas o hasta la tortura, lo vemos en hospitales psiquiátricos, lo vemos incluso en la educación”, apuntó.
Expresó que el problema no es fácil porque es ancestral, por lo que consideró que construir una nueva cultura sin que haya ninguna forma de tortura, ningún trato cruel o degradante es construir un nuevo Estado de Derecho. (Noticaribe)