CANCÚN, MX.- Alarmados como están tras la ola de violencia contra elementos de Seguridad Pública de Cancún, la mañana de este miércoles, varias decenas de policías municipales y federales realizaron un aparatoso despliegue en la Avenida Bonampak para detener al conductor de una camioneta Suburban con presunto reporte de robo, aunque éste dijo ser escolta de un funcionario.
De acuerdo con un informe preliminar, el conductor de la camioneta circulaba con exceso de velocidad, por lo que la policía lo empezó a seguir y le marcó el alto, a unos metros del Kilómetro Cero que conduce a la Zona Hotelera de Cancún.
Aunque el conductor no opuso resistencia ni intentó escapar, sin embargo, durante el operativo de revisión de la unidad, se dijo que la camioneta podría tener un reporte de robo, además de que en la cajuela se encontró un chaleco antibalas, lo que despertó aún más las sospechas, motivo por el que el hombre fue detenido y trasladado a la corporación para revisar si tenía antecedentes y tratar de comprobar si la unidad efectivamente era robada.
No obstante, lo que llamó la atención fue que al lugar concurrieron alrededor de 40 policías, entre municipales y federales, a bordo de camionetas y motopatrullas, todos con sus sirenas encendidas, como si se tratara de la detención de un peligroso delincuente.
El ulular de las sirenas podía escucharse a muchas cuadras a la redonda, contribuyendo al clima de alerta en que se encuentra el principal destino turístico de México, luego de que ayer un policía fuera ejecutado muy cerca de ahí, frente a Plaza Solare, y otros más fueran emboscados por el IMSS de la Cobá, con saldo de tres agentes heridos. (Noticaribe)