Muchos están entusiasmados con que por primera vez el Congreso del estado podrá servir para hacer pagar a funcionarios corruptos.
Ya la Comisión de Justicia determinó la procedencia del juicio político contra el ex alcalde de Cozumel, Fredy Marrufo, cercano, pero muy cercano al ex gobernador Félix González Canto.
Y aún hay otros juicios pendientes, entre ellos los promovidos contra Carlos Lima y Víctor Vivas, magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) y del Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo).
Pero el gozo se puede ir al pozo. El detalle es que al frente de la Comisión de Justicia está Carlos Mario Villanueva Tenorio.
Hay quienes temen que el diputado del PES no sea imparcial en los casos del ‘borgista’ Carlos Lima y de Vivas, sobrino de Félix González.
Incluso, dentro del Congreso del estado, se acusa que poner al ya no tan joven junior Villanueva al frente de la Comisión de Justicia, es como aquello de ‘poner la Iglesia en manos de Lutero”.
Al ex priista chetumaleño se le conoce más allá de los límites de la capital por sus dotes de ‘negociador’.
Esta comisión también está integrada por el panista Fernando Levin Zelaya Espinoza, que es el secretario, así como por Ramón Javier Padilla Balam, del Panal; José Esquivel Vargas, del PRD y Juan Ortiz Vallejo, ex de Morena y ahora independiente.
Al menos hay mayoría.