WASHINGTON.– El presidente estadunidense Donald Trump ordenó el lanzamiento de por lo menos unos 50 misiles contra objetivos militares de Siria, esto en represalia por el reciente asesinato de unos 70 civiles con armas químicas que se le achaca el presidente de ese país, Bashar al-Assad.

“Esta noche ordené un ataque militar contra una base aérea en Siria desde donde se lanzó el ataque con armas químicas”, declaró Trump, luego de darse a conocer las acciones del Pentágono contra el gobierno de Assad.

A su vez, el mandatario estadunidense encomió a las naciones “civilizadas” a que se unieran a Estados Unidos “para poner fin a la carnicería” que ocurrió en Siria, en alusión a los ataques con armas químicas que costaron la vida a unos 70 civiles.

Trump, en su mensaje a los estadunidense sobre el ataque contra Siria, dijo que las operaciones bélicas en ese país del Medio Oriente “son vitales para los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos y para prevenir y eliminar la expansión o el uso de armas químicas mortales”.

De acuerdo con los reportes preliminares, el Comando Central de Estados Unidos llevó a cabo la operación militar con el lanzamiento de los misiles aéreos, lo que representa la primera operación bélica ordenada por Trump desde que llego a la presidencia el pasado 20 de enero.

“Algo ocurrirá”, había adelantado esta tarde el presidente Trump a los reporteros, cuando a bordo del avión presidencial Air Force One se dirigía de Washington a Florida, para recibir en su club de golf Mar-a-Lago al presidente de China, Xi Jinping.

El ataque del Pentágono contra objetivos sirios es la primera intervención militar directa de Estados Unidos en la guerra civil que se libra en Siria desde hace seis años.

La decisión de Trump de atacar al gobierno de Assad fue catalogada inmediatamente por los medios de comunicación estadunidenses como el gran riesgo de que Washington entre en conflicto con Rusia e Irán, países que respaldan al gobierno del presidente sirio en la guerra civil que enfrenta y con la cual sus enemigos políticos buscan derrocarlo.

Pese a que el ataque de Estados Unidos se llevó a cabo de manera sorpresiva, en el Pentágono se encendieron inmediatamente las luces de alerta por los cientos de soldados estadunidense que se encuentran en territorio sirio en calidad de asesores de la oposición a Assad, con el argumento del combate internacional contra el grupo extremista Estado Islámico (EI).

En las últimas 48 horas en la Casa Blanca los asesores de seguridad nacional de Trump, encabezados por el general H. R. McMaster, habían estado valorando la manera en que reaccionarían al ataque con armas químicas que presuntamente lanzó el gobierno de Assad, con el respaldo o por lo menos la venia de Rusia, contra objetivos de oposición y que costaron la vida unas siete decenas de civiles, entre ellos varios niños.

Cuando era candidato a la presidencia de Estados Unidos, Trump criticó al expresidente Barack Obama por querer intervenir directamente contra el gobierno de Assad.

Con el reciente ataque con armas químicas que se le acredita al gobierno de Assad, Trump advirtió que el gobierno sirio había cruzado muchas líneas, pese a que nunca declaró públicamente que tenía pensado ordenar el ataque contra objetivos militares sirios en represalia por la masacre de civiles. (Fuente: Proceso)

Comentarios en Facebook