Parece que se acabó la ‘luna de miel’ entre el gobierno (azul y amarillo) estatal y el ayuntamiento ‘verde’ de Benito Juárez.
El punto de quiebre parece ser la seguridad pública.
Por un lado, el gobernador Carlos Joaquín pretende ir un poco más allá del ‘mando único’ a fin de que sea algo más que coordinación lo que vincule a la Secretaría Estatal de Seguridad Pública con las policías municipales.
Pero, el alcalde Remberto Estrada, al parecer, solo quiere que lo del mando único se reduzca a la coordinación y que quien tenga la última palabra sea la Secretaría Municipal de Seguridad Pública y Tránsito y el propio Presidente Municipal.
Al parecer, Remberto Estrada se fue por la libre al designar al ‘tijuanense’ Julián Leyzaola como el jefe de la policía de facto de Cancún.
La estrategia anticrimen del Gobierno del estado parece una, y la del Ayuntamiento, otra.
El Gobierno estatal busca aplicar una nueva estrategia, mientras que el Ayuntamiento insiste en formulas tradicionales.
Pero lo cierto es que la violencia sigue a la alza en Cancún.
