Si bien Eduardo Ortiz Jasso, dos veces ex director del Instituto de Planeación del municipio de Benito Juárez no está inhabilitado, no es para nada el ideal para estar al frente de la Agencia de Proyectos Estratégicos de Inversiones del Gobierno del estado (Agepro), la cual viene a sustituir al Instituto de Patrimonio del Estado (IPAE).
Se puede decir que Ortiz Jasso, formó parte del grupo de políticos que fueron perseguidos por el ex gobernador Roberto Borge y, como parte de ello, fue víctima de guerra sucia y hasta de un proceso de inhabilitación
que abrió el entonces alcalde pelele de Cancún, Paul Carrillo.
Sin embargo, una cosa es una cosa y otra cosa, otra cosa.
En su desempeño en diversos cargos públicos sus resultados han sido de muy pobres a nulos.
Pero, inexplicablemente, llega a hacerse cargo de una de las oficinas estratégicas del nuevo gobierno, que tendrá como principal tarea la de promover inversiones.
El principal mérito de Ortiz Jasso, dicen los que lo conocen, es que es un excelente vendedor, pero ‘vendedor de humo’.