Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.- La secretaria general del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial, Vita María Canul Canché, y su apoderada legal, Silvia Barbosa Ballote, denunciaron el intento del Oficial Mayor, Manuel Alamilla Ceballos, y del dirigente del sindicato de trabajadores del gobierno del Estado, Roberto Poot, de intentar desestabilizar a esta agrupación y en la que dijeron pareciera estar de acuerdo la secretaria del Trabajo, Catalina Portilla, quien se ha negado a atenderlas.
Ante esa situación, las inconformes decidieron irrumpir en plena comparecencia de la secretaria del Trabajo ante el Congreso del estado.
“Estamos cansadas de que no nos quiera atender y esta fue la única manera”, advirtió Barbosa Ballote.
Afirmó que el Oficial Mayor de gobierno, junto con Roberto Poot, y el presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje violan la autonomía del sindicato todo vez que derivado de que el poder judicial apoyó a Roberto Poot apoyo al PRI y como perdió le pidieron la renuncia a Canul Canché.
La representante legal del la dirigencia sindical señaló que Roberto Poot ha utilizado a diversas personas, entre ellas Wayner Cachón Carrillo trabajador del Congreso del estado en el área de transparencia, Guadalupe Celis, Mirian Negrete, Clara Cruz Fernández, Felipe Chale y Nidelvia Dzul Poot, para demandar a la actual dirigente sindical y todos esos procedimientos han sido rechazados.
Roberto Poot quiere desaforar al Poder Judicial de la Federación del sindicato cuando el Artículo 96 de la ley de burócratas dice que no se puede separar a ningún sindicato del seno de la federación, afirmó.
“Lo único que queremos es que la autoridad laboral nos otorgue nuestra toma de nota”, afirmó.
Dijo que decidieron manifestarse en la comparecencia de la secretaria del trabajo ya que no ha querido recibirlos “y fue la única manera de hacernos escuchar”.
Pareciera que también la secretaria del trabajo esta protegiendo al Oficial Mayor de Gobierno y a Roberto Poot, enfatizó.
Las manifestantes pretendían ingresar al salón de comisiones del Congreso del Estado, pero los escoltas que resguardaban los acceso al lugar impidieron que las mujeres entraran, lo que causó su molestia, llegando a empujarlos y tratar infructuosamente de abrirse paso.
Finalmente un funcionario se asomó del interior del salón y accedió a dejarlas entrar. (Noticaribe)