Por Julio César Solís | Fotos y video: Gonzalo Zapata
CANCÚN, MX.- Regidores de la Comisión de Servicios y Obras Públicas del Ayuntamiento de Benito Juárez, confirmaron la deplorable situación del relleno sanitario operado por la empresa Promotora Inmobiliaria Majahual SA de CV (Pimsa) y confirmaron que la vida cuya vida útil de la última celda es de un mes, además de que no se cumplen los lineamientos prometidos por dicha compañía.
Los concejales Isidro Santamaría Casanova, Berenice Sosa Osorio, Melitón Ortega García y Noel Pinacho Santos, además del director de la paramunicipal Solución Integral de Residuos Sólidos (Siresol), Pablo Fernández, visitaron el basurero en el que es evidente la saturación de desechos, por lo que a marchas forzadas se realiza la construcción de la tercera celda que debería estar lista en menos de un mes.
Los concejales corroboraron que se ha incumplido con la separación y aprovechamiento de la basura, con lo que se ha acelerado la situación de las celdas de depósitos de desechos.
Durante el recorrido, se pudo observar que no se lleva a cabo la separación de la basura, tal y como comprometió la compañía Pimsa, que en su momento presumió con bombo y platillo que sería una Planta de Separación de Residuos Sólidos única en América Latina.
Sin embargo, las mil 300 toneladas diarias de basura que llegan de los municipios de Benito Juárez e Isla Mujeres son vertidas sin distinción.
Además, a decir de los regidores, el riesgo de una contingencia ambiental es latente, lo que convierte al basurero en una bomba de tiempo.
Y es que el ex Gobernador Roberto Borge Angulo inauguró el jueves 20 de agosto de 2015 la Planta de Separación de Residuos Sólidos Urbanos de Cancún-Isla Mujeres, obra que dijo en su momento, ponía a Quintana Roo a la vanguardia en Latinoamérica en el tratamiento de residuos sólidos y en la que se invirtieron poco más de 300 millones de pesos.
“Manifiesto el compromiso del Gobierno de Quintana Roo de generar las condiciones necesarias para el buen manejo de los residuos sólidos, que hoy es una realidad. Un esfuerzo conjunto entre los tres órdenes de gobierno y la iniciativa privada, que busca convertir a la entidad en referente nacional de cómo se deben manejar los residuos sólidos”, señaló aquel día.
En aquel evento, en el que estuvo acompañado por el entonces presidente municipal, Paul Carrillo de Cáceres, por el ex diputado federal y hoy alcalde de Benito Juárez, Remberto Estrada Barba y por Diego García Coudurier, presidente del Consejo de Pimsa, Roberto Borge aseguró que la salud pública y el manejo adecuado de los residuos sólidos se concretaron con la instalación de esa planta, que a su decir no sólo tenía la capacidad para recibir las 1 mil 200 toneladas de residuos sólidos que generan diariamente Benito Juárez e Isla Mujeres, sino también para separar las 600 toneladas de materiales reciclables.
Incluso, Roberto Borge explicó que la operación de la planta y de la compactadora darían mayor vida útil al relleno sanitario. “Tenemos la capacidad para dos celdas más en este Parque Intermunicipal y, a futuro, con el apoyo de la Semarnat, instalaremos un biodigestor para generar energías renovables, que significará mayores beneficios”, aseveró ese 20 de agosto de 2015.
Asimismo, durante su intervención, el presidente de Pimsa, Diego García Coudurier, expuso que la planta, más grande y moderna de México reciclaría, entre otros, papel y cartón, lo que evitará la tala de 720 árboles diarios, y 950 mil botellas de PET al día, el equivalente a 160 kilómetros de distancia si se alinearan una tras otra.
No obstante, a poco más de dos años de la inauguración de esa planta, la vida útil de la segunda celda está por concluir y los desechos no son separados tal y como lo comprometieron el entonces gobierno estatal priista y la propia empresa. (Noticaribe)