CANCÚN, MX.- Desarrolladores del hotel Gran Sirenis Cancún están incurriendo en un delito ambiental, al colocar estructuras metálicas con base de concreto sobre la duna, con la que incluso se encierra un nido de tortugas, a un costado de Playa Delfines, en el kilómetro 14 de la Zona Hotelera de la ciudad, denunció Katerine Ender Córdova, presidenta del Movimiento Social en Pro de los Derechos del Pueblo.
Entrevistada en el lugar, mientras trabajadores avanzaban en la colocación de estos postes metálicos sobre la arena, recortando la playa junto al icónico Mirador, la activista indicó que los dueños del predio no tienen autorización para afectar las dunas, menos en un área de anidación de tortugas, pues esto viola la ley y tratados internacionales.
Por este motivo, indicó que se dará seguimiento a las denuncias presentadas anteriormente contra este proyecto, tanto ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) como ante la Procuraduría General de la República (PGR).
Ender Córdova llamó al número de emergencias 911 para reportar estos hechos, dándoles aviso a los trabajadores, que le indicaron que no podían detenerse porque tienen órdenes. Después de un tiempo, arribaron agentes de la Policía Federal que tomaron constancia de los hechos, sin intervenir más allá que servir como testigos de lo ocurrido.
“Esta es una playa mundialmente conocida, certificada, donde debería haber una vigilancia extrema y no ha llegado ninguna autoridad que no sean los federales, para frenar el trabajo que se está dando de manera ilegal”, comentó la activista. “Una cosa es que sean concesionarios, que tengan un permiso de Semarnat, y otra cosa es que ejecuten de una manera ilegal esos permisos y que nos priven de nuestras playas”.
Cabe destacar que Gran Solaris Cancún recibió la autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para construir un hotel de 14 niveles, con una inversión de 90 millones de dólares. (Noticaribe)