Leslie Gordillo
CANCÚN, MX.- Integrantes del Observatorio Legislativo de Quintana Roo, con 20 meses de operaciones, presentaron algunos de los trabajos realizados donde destacan que gran parte de la problemática que existe en el país es la falta de participación y exigencia hacia los funcionarios públicos.
Entre las faltas principales mencionaron la inexistencia de una verdadera agenda de trabajo, así como del incumplimiento de compromisos que se habían establecido antes de iniciar trabajos en la presente Legislatura, destacando la desaparición de la Gran Comisión como el principal compromiso no cumplido, por lo que buscarán en este año seguir fortaleciendo los trabajos necesarios para mejorar las condiciones del estado.
“La Gran Comisión es algo que quedó de la prehistoria porque en esa gran Comisión se controla el presupuesto, los nombramientos dentro del Congreso y la agenda. Por eso los gobiernos la tuvieron bajo control por un grupo de diputados y en la presente legislatura se comprometieron a eliminarla y cuando llegaron a tomar el control del Congreso dijeron, no, creo que está muy bien tener el presupuesto y los nombramientos; seguramente la van a eliminar para la siguiente conformación de cámara”, se lamentó Eduardo Galaviz Ibarra, presidente de dicho observatorio.
El Congreso de Quintana Roo, añadió, es extremadamente caro. No es congruente tener un presupuesto, conjuntamente con la Auditoría Superior, de 630 millones de pesos, cuando en Campeche y Yucatán tienen 220 en promedio, estados con más población y municipios, sobre todo cuando en Quintana Roo hay tantas carencias y que en algunos de los casos incluso para el recurso de ayuda social se están clonando algunos nombres, muestra clara de la irregularidad en la que se está incurriendo.
Asimismo, dieron a conocer que, de las 126 iniciativas presentadas, desafortunadamente en educación y seguridad no hubo temas significativos, pero sí hubo un par que les parecieron hasta cierto punto absurdas, como:
• Implementar yoga para combatir el bullying.
• Permitir que sólo personas con licencia puedan podar árboles, cuando sólo dos de ellas las tienen en el estado.
La idea es tener apertura para que asociaciones de la sociedad civil puedan proponer iniciativas, pero hasta ahora no se ha hecho.
SE NIEGAN AL PARLAMENTO ABIERTO
Por lo pronto, se dio a conocer, el Observatorio Legislativo de Quintana Roo ha comenzado ya a integrar trabajos con otros organismos para buscar mecanismos como el sistema de Parlamento Abierto que ya se realiza en Nuevo León, incluso vinieron al Congreso para explicar el funcionamiento, pero los diputados locales no los atendieron.
“No quieren estar en ese sistema porque el parlamento abierto es para hacer acuerdos con organizaciones y que si en la página web se dice, por ejemplo, que hay un gasto de asesores de 100 mil pesos, se pueda acudir y desglosar; también hemos insistido que las iniciativas generadas en colegios se den en este marco de apertura y así se concrete una buena ley de participación ciudadana”, puntualizó. (Noticaribe)