Sin embargo, en un encuentro con líderes empresariales en la Casa Blanca, Trump no reveló el nombre de los países afectados.
En respuesta, la Cámara de Acero de México informó que si Estados Unidos impone aranceles al acero nacional, el gobierno mexicano debería responder con medidas recíprocas e inmediatas.
De acuerdo con la agencia EFE, el presidente estadunidense tenía hasta mediados de abril para decidir qué medidas adoptar después de que el Departamento de Comercio le enviase un informe sobre los efectos de las importaciones de esos productos sobre “la seguridad nacional”, en el que recomendaba aplicar estos aranceles o cuotas.
“Básicamente la mayoría de ustedes van inmediatamente a expandir (sus operaciones) si les damos un campo de juego equilibrado. Lo que se ha permitido que pasase durante décadas es una desgracia”, dijo el mandatario ante directivos de grandes empresas siderúrgicos como Arcelor Mittal, Nucor y US Steel Corporation.
En el informe, enviado por el Departamento de Comercio a mediados de febrero, se recomendaba la aplicación de fuertes aranceles a la importación de acero y aluminio de hasta el 50% y se planteaba la posibilidad de adoptar cuotas.
Aunque Trump no citó países en concreto, el secretario de Comercio, Wilbur Ross, subrayó en el documento, conocido como “Informe 232”, que China es “el gran responsable” del exceso de acero en los mercados internacionales, ya que “solo en un mes produce lo mismo que Estados Unidos en todo un año”.
Otros países explícitamente señalados son Brasil, la India, Rusia y Corea del Sur.
En enero, el mandatario estadunidense ya había ordenado imponer restricciones a las importaciones de lavadoras y paneles solares, pero las medidas anunciadas contra el acero y aluminio, de acuerdo a los analistas, tienen mucho mayor impacto por el volumen de negocio que generan esos sectores. (Fuente: Proceso)