Fotografía del reo ejecutado en el hospital Playa Med. Bajo una de sus piernas quedó una bolsa con polvo blanco, al parecer cocaína.

CANCÚN, MX.- El ex convicto Alfonso Enrique C.E., alias ‘El Poncho’, el presunto líder del Cártel del Golfo que fue ejecutado ayer en el hospital privado Playa Med, en realidad trasladó su red de distribución de drogas a ese nosocomio donde, se informó, convalecía de unas lesiones en las piernas desde hace más de seis meses en la habitación número 17.

‘El Poncho’ fue arrestado el 26 de julio del 2017 por elementos de la policía federal y estaba bajo proceso por un juzgado de control federal por el cargo de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.

Sin embargo, el presunto líder de la célula del Cártel del Golfo en Cancún permanecía hospitalizado desde el pasado 22 de agosto por lesiones en las piernas provocadas presuntamente por disparos de arma de fuego, aunque las autoridades no han precisado en qué contexto fue herido si para ese entonces ya estaba en prisión.  

 

Lo que se sabe es que el recluso ejecutado presentaba un largo historial por diversos delitos relacionados con la distribución de droga en este polo turístico.

De manera extraoficial, a ‘El Poncho’ se le atribuye el haber ordenado el incendio del spa ubicado en la SM.67 de Cancún el 22 de septiembre del 2014, en donde murieron cinco personas en el hospital por las quemaduras que presentaban. El 10 de abril del 2015 fue detenido, pero fue liberado sin que se conozcan los detalles.

¿NARCOTIENDITA EN EL HOSPITAL?, ¿Y EL ALCAIDE?

De acuerdo con información obtenida extraoficialmente por una fuente cercana a las investigaciones, se sabe que en el interior de su habitación en la clínica privada Playa Med, ubicada a unos metros del Palacio Municipal, le fue encontrado una bolsa de material sintético que tenía polvo blanco (presuntamente cocaína) la cual quedó tirada en el suelo, bajo del muslo izquierdo, al momento en que fue abatido, según se puede apreciar en una fotografía que se difundió anoche.

Pero, además, al recluso ejecutado también le fue encontrado una báscula que fue hallada pegado atrás de uno de los cuartos de la habitación, así como documentos a su nombre y una libreta con una lista de nombres atrás de un sillón que se están investigando y dos teléfonos celulares.

Atrás del sillón, había una libreta con anotaciones y documentos diversos que fueron asegurados como parte de las investigaciones.

El cadáver presentaba un orificio de arma en la región parietal derecha superior, así como en la región preauricular izquierda, además de dos heridas en la región abdominal y un orificio en la región lumbar izquierda. También tenía una herida punzocortante en la zona lumbar  derecha.

Al ejecutado, que al momento del ataque sólo vestía un boxer, se le encontró, en el área de los genitales, una hoja con nombres y números.

En la habitación del hospital se hallaron tres ojivas metálicas de color dorado y tres casquillos percutidos del calibre .9 milímetros, además se encontró una bolsa que contenía sustancias similares al ‘crack’ y la cocaína.

También se decomisó un chip y una tarjeta de memoria, así como una computadora portátil.

El reo estaba bajo la custodia del director del Cereso, Jorge Adrián López Valenzuela, quien llegó al cargo desde el pasado 17 de diciembre de 2017.

Las autoridades ministeriales aseguraron los videos de las cámaras del circuito cerrado del hospital para ampliar las investigaciones.

En el lugar también fue ejecutada su pareja sentimental identificada como Natalia Guadalupe Díaz Peña, la cual se encontraba de visita.

La mujer portaba un bolso con documentos y un teléfono que también fue asegurado.

 

La Fiscalía General del Estado (FGE) abrió la carpeta de investigación 92/2018 por el delito de homicidio en agravio de Alfonso Enrique, en contra de quien o quienes resulten responsables. (Noticaribe)

 

 

 

 

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