CANCÚN, MX.- Fue la tarde del 29 de julio de 2017 cuando un joven falleció en el Hospital General de Cancún, luego de ser apuñalado sobre la prolongación de la avenida Tulum, en la zona denominada El Crucero, hecho que fue grabado en vÍdeo y viralizado por medio de las redes sociales.
En respuesta, la Secretaría de Seguridad Pública Municipal anunció que se colocaría una caseta de policía. Un día después, la instrucción del jefe policÍaco de Cancún, Darwin Puc Acosta, se cumplió y se instaló una caseta móvil.
En los primeros días era común observar dos patrullas afuera de la misma, estacionadas sobre la avenida López Portillo, así como por lo menos tres agentes.
Con el paso del tiempo, la cifra de tres bajó a dos, luego a uno y a veces, ninguno.
“Habemos (sic) dos elementos, pero tenemos la instrucción de salir a pie a recorrer la zona, entonces no queda nadie”, comentó un oficial que pidió se omitiera su nombre por temor a ser castigado.
El miércoles, justo enfrente de la caseta, unas personas con arma de fuego dispararon sobre dos vendedores ambulantes a los que mataron de manera instantánea, además de herir a una tercera persona que se encontraba en “el lugar equivocado, en el momento equivocado” y quien terminaría perdiendo la vida horas después.
“Aquí es común que haya pleitos, sobre todo los fines de semana”, comentó Martha, una vendedora ambulante de la zona y quien pide no se le tome foto ni se ponga su nombre completo por temor.
– ¿A quién le teme?
A esta pregunta contestó con silencio.
Una empleada de un comercio ya establecido dice que muy pocas veces se ve a los policías y aunque estén adentro, ocurren cosas “feas” en el crucero.
“Aquí no hay día en que no haya un asaltado, un pleito y, lamentablemente, ya hasta balazos hay”, comentó.
De vuelta con otro de los policías, quien al igual que su compañero pidió no se le tomara foto ni se anotara su nombre, aseguró que lo de la caseta es “sólo una pantalla” porque el lugar no está equipado con nada.
En el interior no hay radio de comunicación, teléfono, baño ni aire acondicionado.
“Ahora que está el calor bien fuerte, adentro es un baño sauna, insoportable”, dijo.
Mencionó que se suponía que la caseta iba a estar equipada “pero nada de eso le importa a los jefes”, concluyó. (Noticaribe)