CIUDAD DE MÉXICO.- José Antonio Meade se declaró totalmente honesto luego de presentar su declaración “7de7”, como le llamó a la exhibición de sus bienes patrimoniales fiscales, bancarios y de ingresos de los últimos 20 años que, dijo, acreditan su forma de vida.
En la declaración, reportó ingresos anuales por 2 millones 300 mil pesos, así como acreditó ser propietario de un terreno de 254 metros con valor de 2.3 millones de pesos, y una casa de 145 metros valuada en 1.4 millones, ambos adquiridos en 2002.
En conferencia, el candidato presidencial de la coalición “Todos por México” dijo que presentaba su declaración “3de3” (patrimonial, fiscal y de intereses), pero con cuatro agregados.
El exsecretario de Hacienda reconoció el valor de la declaración “3de3” que impulsó la ciudadanía, pero precisó que para evaluar la conducta de un servidor público se requieren de algunos elementos adicionales y que él propone “en congruencia con la iniciativa para prevenir y combatir la corrupción” que planteó la semana pasada.
Explicó que, como cuarto elemento, se tiene que considerar a una opinión técnica de un contador público certificado que acredite la congruencia de la evolución patrimonial que se compone del ahorro acumulado y los ingresos percibidos por el declarante y su cónyuge.
El quinto elemento: las consultas al registro público de la propiedad en todas las entidades.
El sexto: la solicitud al Servicio de Administración Tributaria (SAT) un informe integral respecto de su situación y comportamiento fiscal.
Y séptimo: que un notario público dé fe de la veracidad de todos los documentos presentados.
José Antonio Meade dijo que se comprueba que no tiene créditos solicitados, tampoco representantes comerciales, ni ha emitido facturas, lo que demuestra de manera exhaustiva, transparente, y sobre todo con sustento documental, el origen, evolución y la congruencia de su patrimonio, considerando como base su salario como servidor público durante los últimos años.
El candidato presidencial retó a los demás candidatos a certificar la congruencia de su evolución patrimonial de la misma forma con la que él lo ha hecho, con la misma transparencia y rigor, y reiteró el llamado a Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya a debatir sobre el tema.
“No hay pretexto para no hacerlo”, dijo tras asegurar que reafirma su compromiso de actuar con rectitud, transparencia y legalidad como lo ha hecho en su vida de funcionario. (Fuente: Proceso)