La avaricia y abuso del poder por parte de  ex gobernadores de Quintana Roo como Roberto Borge Angulo han significado la defraudación  de varios millones de dólares  esquilmados a grupos de inversionistas, quienes fueron engañados con la adquisición de terrenos propiedad del gobierno del estado, como son los predios de  Xcacel-Xcaelito, santuario de la tortuga marina.

Precisamente, uno de estos inversionistas inmobiliarios, Faustino Martínez,  nos narra la  historia de 23 años de tropelías de estos personajes políticos, al externar sus comentarios respecto a la reciente entrega de esta columna intitulada “Atentado contra Xcacel-Xcacelito, santuario de la tortuga marina”.

 Dada la importancia de este testimonio, a continuación la versión estenográfica de sus dichos para que Usted, amable lector, norme su propio  criterio:

“Hay errores quizá por la falta de conocimiento de todo lo que ha pasado en 23 años, pero lo más fuerte es que estoy muy de acuerdo en que aquello es indesarrollable,  porque ahí yo fui objeto de un engaño por parte del gobierno del Estado. Hace 23 años cuando compré eso, de hecho yo fui el promotor, inocente,  porque yo no sabía lo que había detrás de todo eso.

Yo era el Director Financiero para un grupo importante aquí y entonces el gobernador personalmente se acercó a nosotros, a mí, y en mi oficina me pidió que les ayudara puesto que la parte de terreno duro que da a la playa, de lo que se considera bahía Xcacel Xcacelito, estaba embargada por la deuda estatal.   El gobierno para evitar un mal impacto de imagen y de más, se acercaron a mí, y yo sin conocer la verdad, sin saber nada de nada, compramos esto con la obligación de construir en el plazo de 18 meses, no con la opción, con la obligación de construir.

Para hacer el cuento corto, que le puedo dar todos los detalles, documentos; invertimos ahí, yo personalmente en dos terrenos que tengo, casi 8 millones de dólares. Los otros inversores que eran Grupo Sol Meliá, Enrique  Martinó, Familia González Angulo, invirtieron más que yo.

Lo grave de todo lo que se hizo en la prensa estos días, es que ese terreno tiene una gravedad añadida, ese terreno ya fue comprado por el gobierno del Estado. A cambio del terreno se hizo una permuta a la Familia González Angulo, de Cozumel, donde les concedieron un terreno inmenso de 2.6 millones de metros cuadrados, y el gobernador lo volvió a revender a testaferros suyos por nada. Ese terreno ha sido vendido dos veces, ha sido comprado dos veces por el gobierno del estado.

Ese terreno y el colindante, originalmente formaban parte de un Fideicomiso, este Fideicomiso se subdividió, el terreno fue permutado por el Gobierno del Estado a cambio de un terreno inmenso que fue permutado en desventaja para el gobierno, clara, porque con  los demás permutantes que eran corporaciones, nosotros y Nodan Promociones, no nos  fueron tan generosos; pero con ellos, con la familia González Angulo, les dieron un terreno de 2,5 millones de metros cuadrados 2.6 a cambio de ese pedacito. Esto ocurrió en el año 2006, 2007, aproximadamente. Ya se permutó, ¿cómo puede ser que ese terreno que  ya se había permutado, que el Gobierno ya lo había pagado, vuelva a caer en manos privadas?, esa es la pregunta.

Yo siempre que me he acercado al gobierno, y le puedo contar mil  cosas, porque nuestros terrenos nos lo robaron, mis terrenos acabo de conseguir registrarlos de nuevo puesto que el gobernador anterior hizo desaparecer los  libros de registro de esos terrenos, los míos, por eso esos terrenos se tienen que permutar por el gobierno del estado, el gobierno del estado se tiene que hacer cargo y me los tiene que permutar por otro tipo de desarrollo. Yo soy empresario, no voy a entrar en la grilla si es justo o no es justo, simplemente yo les dije ese terreno está quemado, tiene un exorcismo hecho en base a todo lo que ha pasado, o es falso originalmente desde una exigencia  que nos hicieron de construir  después de gastar millones de dólares para hacer el Plan de Impacto Ambiental.

Nosotros originalmente les ofrecimos al gobierno del estado un Centro Tortuguero internacional donde íbamos a invertir 5 millones de dólares y traer biólogos internacionales y aquello se convirtió en una tristeza, aquello no es en realidad un paraíso para las tortugas, aquello es un infierno para las tortugas. Puesto que las tortugas, el 99 por ciento de ellas, yo tengo un estudio, mueren antes de llegar a la barrera de coral.

En este momento en Quintana Roo, es ‘Norte a sur’ el mayor productor de tortugas vivas que las sueltan en el Ritz Carlton, sueltan casi 200 mil tortugas al año, ¿por qué?, porque les cambia la anidación, tienen biólogos, las protegen, las sueltan por la noche, etc. Pero no es Xcael, Xcaelito, pudiera ser, pero entre los desechos que hay, que no se si han visto, pero Xcacelito es un desastre, después de los múltiples huracanes todas las arenas desaparecieron de ahí y las tortugas no pueden anidar, porque el suelo es roca dura,  es una forma de piedra, Xcaelito es imposible, y en Xcacel, de las que anidan allí, mueren el 99 por ciento.

Yo estoy de acuerdo con que aquello se preserve, yo soy un fanático de la preservación, así que yo ahí fui objeto de un engaño.

El objeto de la especulación fue promovido por los diversos gobernadores, eso era propiedad del estado, incluido la Caleta de Xelha, de hecho el proyecto original del año 71 se llamaba Fideicomiso de la Caleta de Xelha, Xcacel y Xcacelito.

Luego los gobernadores se endeudaron, pidieron dinero prestado que no tenían para pagar, nos pidieron un favor y nosotros sin verlo, puesto que en aquel momento se vendían terrenos a 2, dólares, a 3 dólares el metro cuadrado en la zona, porque no había ningún hotel.

Yo lo que pensé, porque yo vengo de finanzas, yo pensé que nos daba más seguridad -dado que no había Plan de Ordenamiento en aquel momento-, comprárselo al gobierno del estado, que me firmó un documento oficial, que me garantizaba y me exigía construir 10 cuartos por hectárea  en 18 meses, lo vi con seguridad, nunca pensé que a los 6 meses el mismo gobernador editaría un Plan Territorial contra ese terreno. Nosotros hemos gastado una fortuna de tiempo y dinero y sobre todo de ilusión en algo que resultó un engaño.

Mi acercamiento al gobierno es que yo exijo una permuta, a mí me tienen que compensar, no con dinero, sino me den un terreno para que yo pueda hacer un hotel para nuestra empresa, eso es todo, así de sencillo.

Es más grave el simple hecho de que la SEMARNAT le pueda dar a uno el permiso, que yo lo dudo, ese terreno en el primer Plan de Ordenamiento Territorial, en el primero que se editó, eran 10 cuartos por hectárea,  ¿cómo puede ser que ahora el señor se presenta con 20?

Aun en el peor de los casos que nadie se hubiera quejado, eso es ilegal, a menos que tenga alguien en el gobierno y  harás lo que te de la gana. No pueden ser 20 cuartos como anuncia la prensa, no sé si es correcto lo que han copiado del proyecto, cuando originalmente lo máximo era 10, fueron rebasados posteriormente, luego fueron declarados parque y ni siquiera es parque nacional, porque el parque nacional solamente lo puede declarar el estado, hace 10 meses existía una nota la cual decía que ese parque no era parque nacional.

Eso cuando se vendió eran terrenos para construir un fideicomiso, a los 6 meses se hicieron dos consultas populares, se llevaron ante la Semarnat, se hicieron estudios en la Universidad de Quintana Roo que costaron 4 millones de dólares, y al final del día la Semarnat aprobó nuestro proyecto, y a la semana de entrar Vicente Fox lo denegaron, siendo que Semarnat ya lo había aprobado, lo había aprobado Solidaridad, el gobierno del estado. Yo estoy contento de no haber construido ahí, al final yo no necesito una permanente controversia con los medios, con ecologistas, además yo estoy de acuerdo que se conserve eso.

El problema de trasfondo, quizá al final, el resultado sea el crimen ecológico, pero el origen de todo eso, es la avaricia e irregularidades legales de los gobernadores sucesivos, con el agravante multiplicador, que además ese terreno particularmente donde se anuncia ese proyecto, no solamente ya fue adquirido, ya fue re-adqurido por el gobierno del estado en forma de permuta, ¿cómo puede ser que en el plazo de dos gobernadores, haya vuelto a caer en manos privadas?

Yo no sé si la Fiscalía General del Estado y el Gobernador,  no se han dado cuenta, pero eso se tiene que poder tirar, ¿quién lo compró?, ¿cómo lo compró?, ¿a cuánto lo compró?, y seguramente se va a dar cuenta que quién  lo compró, el gobernador Roberto Borge lo revendió a un testaferro suyo, un tal Ricardo Vega Serrador, seguro que usted encontrará que le dio 5 o 6 millones de  dólares por debajo al mismo gobernador, se va a encontrar con eso, así nos lo dijeron sus abogados.

Es inexplicable que una cosa así ocurra con el contubernio del gobierno de Quintana Roo, concluyó Faustino Martínez; empero, lo anterior será motivo de posterior análisis en otra entrega de HORA 14.

 

mauricioconde59@outlook.com

Comentarios en Facebook